Camagüey, 24 abr.- Con la entrega del Premio Olorum al músico camagüeyano Wilmer Ferrán, por su destacada trayectoria al frente de su agrupación Rumbatá, concluyó anoche en esta ciudad el VIII Festival homónimo, luego de cinco jornadas de disfrute.
Organizada bienalmente por el Ballet Folclórico de Camagüey (BFC), la cita reunió en escenarios lugareños a colectivos danzarios de otras provincias cubanas quienes actuaron junto a varias compañías agramontinas.
ISA Danza, Nataly y su Latino Show y el Ballet Folclórico Babul, de Guantánamo, fueron algunos de los que brindaron su arte, tanto en los teatros Avellaneda y Principal, como en espacios abiertos, en plazas y calles de urbe.
Clases magistrales impartidas por Silvina Fabars y Manolo Micler, premios nacionales de Danza 2015 y 2017, respectivamente, estuvieron entre los momentos cimeros del Olorum, que nuevamente se reafirmó como un espacio para el folclor como patrimonio e integración de nuestra identidad cultural, como destacara Reinaldo Echemendía Estrada, director del BFC.
Por los anfitriones participaron el Ballet de Camagüey, el Grupo Bonito Patuá, el Ballet Contemporáneo Endedans, la agrupación Rumbatá y el Conjunto Artístico Arlequín.
Las sesiones teóricas se desarrollaron en la Sala Nuevo Mundo, donde varios intelectuales presentaron investigaciones sobre las expresiones músico-danzarias de la cultura popular tradicional que son patrimonio de la Cultura cubana.
Entre ellas destacó la ponencia de la Doctora en Bárbara Balbuena, experta en danza folclórica y contemporánea, sobre el complejo de rumba en Cuba, género declarado en 2016 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Este año el Festival Olorum estuvo dedicado al aniversario 55 del Conjunto Folclórico Nacional y del Sistema de la Enseñanza Artística en Cuba y a los 50 años del Ballet de Camagüey.