Eduardo Roca Salazar, Choco
El Consejo Nacional de Artes Plásticas distinguió a Eduardo Roca Salazar, Choco, con su más importante galardón.

Las figuraciones de Eduardo Roca Salazar, Choco, tienen la fuerza de lo ancestral, de la mezcla maravillosa de la cultura cubana. Pintor, grabador, escultor. Estamos hablando de un artista con los pies bien puestos en la tierra (la tierra, el color de la tierra, es presencia habitual en sus creaciones), pero con un vuelo que lo ha distinguido en el panorama de las artes visuales cubanas de los últimos años.

Este premio reconoce un itinerario pletórico, de reconocibles marcas. Su estilo es inconfundible: las líneas agrestes, sus rostros de extraña plasticidad, expresión poderosa de sentimientos raigales, visión incisiva e inspirada de los dramas de la cotidianidad, exploración en el entramado íntimo del ser cubano, tan marcado por la herencia africana.

La de Choco es una poética absolutamente consolidada, ha modelado algunos de sus más importantes referentes, como todo ese acervo que nos llega desde el continente negro.

Pero él no se ha quedado en su estudio: por su labor docente, en la formación de nuevos artistas, ha ganado el agradecimiento académico, en Cuba y otras regiones del mundo. El Premio Nacional de Artes Plásticas es un galardón importante y más que merecido. Pero el Choco, desde hace mucho, integra la vanguardia del arte cubano contemporáneo. Yuris Nórido en el Noticiero Cultural.