La Habana, Cuba. – Una de las obras que se entregarán a La Habana por su medio milenio es el Castillo de Santo Domingo de Atarés, recuperado tras complejas labores de restauración para convertirlo en un museo de sitio dados los valores patrimoniales de esa fortaleza del siglo XVIII.
La edificación, construida en la loma de Soto para resguardar el fondo de la bahía, requirió años de investigaciones arqueológicas y trabajo por especialistas de la Oficina del Historiador de La Habana para devolverle su morfología original.
El Castillo de Atarés acogerá la muestra permanente El Genio de Leonardo da Vinci -a 500 años de la muerte del maestro del Renacimiento- con reproducciones de artefactos que él diseñó, adelantándose a su época.
El alcalde de Vinci, en Italia, donará una piedra de la ciudad natal de Leonardo, donde radica un museo con colecciones de máquinas y modelos concebidos por el genial artista.
