La compañía cubana Danza Espiral estrenará hoy en el emblemático Teatro Sauto de Matanzas las obras Construcción de un cuerpo deseante y Exilio, ambas pertenecientes al coreógrafo chileno Bernardo Orellana.

Estas presentaciones se extenderán hasta mañana domingo en la propia sala, y en los dos días también se efectuará el reestreno de la pieza Desde el silencio, que forma parte del repertorio general del citado colectivo danzario de Matanzas.

Orellana está vinculado a la agrupación local desde su participación como jurado, en el Concurso Nacional de Coreografía e Interpretación DanzanDos de 2010. Según Liliam Padrón, directora del grupo danzante, el par de creaciones del suramericano reflejan el sentimiento de ansias de libertad y del sufrimiento de exilio del propio autor, a través del lenguaje de señas que conjuga con los recursos escénicos.

'Parten de miradas personales sobre temas universales, comunes y esencialmente humanos, como una compleja formación de la cadena de ADN', comentó Padrón.

Fundada en 1987, la compañía es iniciadora de la llamada Nueva Ola de la Danza Cubana, integrada por colectivos que rompieron con las formaciones de bailes tradicionales en la isla en el pensar y hacer la danza a finales de los años 80 y principios de los 90 del siglo pasado.

Especialistas destacan que danza Espiral se distingue por un alto vuelo teatral e intensas coreografías, ha sido multipremiada y formado a generaciones de bailarines, y organiza el concurso nacional de coreografía e interpretación DanzanDos.