Idalys Ortíz, campeona olímpica en Londres 2012

Dos medallas de oro y una de plata en cuatro divisiones fue la despedida de Cuba a lo grande en el judo de los Juegos Panamericanos, junto con la confirmación de Idalys Ortíz, campeona olímpica en Londres 2012.

De esta forma, los cubanos dominaron en Lima 2019 la disciplina inventada por Jigoro Kano en el siglo XIX y que hará del torneo de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 uno de los más interesantes de la historia.

En este concierto, hay espacio para una pequeña isla del Caribe que desde hace mucho tiempo se pasea entre las potencias del mundo. Para no dejar dudas, Lima 2019 acaba de subrayarlo con cierre dorado de los dos supercompletos, Idalys (más de 78) y Andy Granda (más de 100).

'Hay un momento en que ya ganaste centroamericanos, panamericanos, olimpiada, mundiales y te preguntas, ¿y ahora que sigue? Hasta que te crees con posibilidades de volver a hacer el ciclo y soñar otra medalla en cada nivel', comentó la fornida judoca cubana.

Con mucho más recorrido, le dijo Prensa Latina para provocar reacciones. 'La madurez significa que nos estamos poniendo viejos, pero somos más sabios (eso espero, se ríe), y la idea está fija, claro está, Tokio si dios nos ayuda y no tenemos lesiones'.

Dueña de las coronas panamericanas en Guadalajara 2011, Toronto 2015 y Lima 2019, con varias preseas en líneas del orbe y el cetro dorado londinense, 'es bueno ponerse metas, pues anima y señala un ejemplo al resto del equipo, orgullosos de defender el judo de Cuba en todo nivel'.

A Cuba se le escapó una división, 78 femenino, en la cual la brasileña Mayra Aguiar, doble campeona mundial, reiteró su dominio absoluto sobre Kaliema Antomarchi, a la que doblegó por ippon en tiempo extra (regla de oro).

Aguiar, bronce en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, se impuso a la propia Antomarchi en el certamen continental efectuado precisamente aquí. El balance es de 8-0 para la del gigante sudamericano.

Idalys Ortiz sumó, al vencer a la boricua Melissa Mojica por ippon (descalificación), la presea dorada número 32 de Cuba en los Panamericanos de Lima. Luego Andy Granda, se impuso por ippon al venezolano Pedro Pineda para aportar el oro 33 de la mayor de las Antillas.

Sorpresa fue el estreno en el máximo podio del chileno Thomas Briceño, quien tras recibir un waza-ari en la final de los 100 kilos por el estadounidense LA Smith, lo derrotó por ippon.

La víspera, Cuba alcanzó otras dos medallas de oro en judo. Maylín del Toro primero, en la división de los 63 kilogramos, e Iván Silva luego en los 90, aumentaron la cosecha, con el añadido de dos de bronce de Jorge Martínez en los 81 y Onix Cortés en 70.

Además, un subtítulo de Vanesa Godínez (48) y dos terceros escaños (Roberto Almenares-60 y Nahommys Acosta-52); el trono Magdiel Estrada (73) y otra bronceada de Osniel Solís (66).