Peloteros cubanos

Nos fuimos al terreno del Victoria de Girón, para conocer el ánimo de los protagonistas, recién finalizado el quinto juego de esta final rompecorazones.

Corazones de todos los colores, porque las emociones que han regalado estos dos equipos atrapan y conectan hasta a los que no son parciales de Camagüey ni de Matanzas. Sobre cómo se sienten Toros y Cocodrilos para el partido de este sábado, conversamos con algunos de los protagonistas.

Alexander Ayala, el capitán de los Toros de Camagüey, dijo a CubaSí: “Nosotros salimos a buscar el juego y lo logramos, ahora vamos para nuestro patio, nuestra afición y vamos a matar el play off allá. El mismo que cerró, Cousin va a abrir y está listo todo el mundo”.

Es más que optimismo lo que se respira entre los camagüeyanos para salir a pelear el campeonato, cada uno desde su pedacito. Para Ayala, por ejemplo, la clave ha sido: “empujar y empujar, hacer un sueño realidad: ser campeón con mi equipo, ya que soy campeón con otros equipos y también inspirar a los muchachos para seguir teniendo estos resultados.”

Yosimar Cousin, un torito que apenas pasa de los 20 ha embestido con fuerza a los Cocodrilos, Lazo le dio la pelota en un momento tenso, para cerrar el juego y fue más fuerte el amor que la costumbre de ser abridor:

“Me sentí un poco incómodo, porque uno estaba en el dugout, había entrenado, pero siempre estuve motivado porque mi equipo necesitaba esta victoria como fuera y lo que hice fue calentar rápido, preparar mis lanzamientos y salir a hacer el trabajo. Gracias a Dios salió bien.”

El DT Miguel Borroto ya lo anunció para iniciar el partido de este sábado y el jovencito dice que allá va, para arriba del lío, o mejor dicho, para arriba de la lomita con todo: “Me siento bien, el equipo lo necesita, yo tengo la inspiración y con mi equipo que ha salido a luchar, a darlo todo aquí en Matanzas, creo que vamos a alcanzar la victoria”.

De Tigre a Toro Yorbis solo tuvo que recorrer unos cuantos kilómetros, pero sus horas de vuelo acumuladas en la pelota cubana las ha puesto en función de defender la camiseta de Camagüey: una final siempre es difícil, contra el equipo que se juegue. No hay rivales grandes ni chiquitos, lleva mucho rigor y gana quien mejor haga las cosas en el terreno. 

Ahora mismo estoy viendo que hay dos equipos bastante competitivos, es una final cerrada, reñida, yo estoy seguro de que muchos aficionados matanceros pensaban que se quedaba aquí, pero cada uno de nosotros se había comprometido a aportar todo el talento de cada uno. Estoy muy contento, satisfecho, pero vamos por más.

Sin embargo, los del pantano tampoco están dispuestos a rendirse, se va a la llanura con las botas puestas, al decir del mentor Armando Ferrer, el ánimo está bien arriba. Sobre el partido de este jueves comento para CubaSí: “se perdió un gran juego de pelota, se abrió al inicio el marcador y ya después cuando reaccionamos, era un poco tarde, pero psicológicamente los muchachos están preparados para ir allá a ganar”.

Tal y como dijo en la conferencia de prensa, Ferrer prefirió no adelantar nombres en cuanto a pitcheo: “me voy a reunir con el equipo técnico a ver qué ellos creen y tomar las decisiones”, aseguró el asistente de Sile Junco en los Henequeneros campeones del 1991.
 

Desde el bullpen, el experimentado Jonder Martínez asegura que ya se están calentando los brazos, sin susto: “el equipo está en forma, está en un buen momento, dividimos en Camagüey y ganamos dos aquí, así que nos vamos con el play off a nuestro favor. El pitcheo, pienso que Entenza, Yosvani Torres o quien decida la dirección, van a salir a ganar, van a hacerlo bien, yo debo estar de relevo si hace falta y me siento listo también.”

A los que se inquietan ante la discreción de algunos bates que podrían ser claves, Armando Ferrer responde que no es lo mismo la serie regular que el play off y recuerda que en el propio partido de este jueves se anotaron once imparables. Para él la ofensiva, la defensa, cada departamento del juego, tiene que luchar contra los Toros y también contra la ansiedad que genera una final: “todos tenemos las ganas de ganar, pero hay veces que tenemos que poner la cabeza encima de los hombros y la ansiedad no nos puede jugar una mala pasada.”

El mensaje de Ferrer a sus muchachos es de confianza: “De mi equipo, todo el mundo ha jugado play off, no es una cosa nueva para ellos, saben la importancia de ganar un campeonato y nada, hay que darles confianza, que se relajen, que jueguen para divertirse, para regalar un gran espectáculo y las cosas salen.”

Y “los muchachos”, también confían en la victoria: “el equipo está muy motivado, no se pudo alcanzar el triunfo hoy, pero se terminó con la autoestima alta y vamos para Camaguey a darlo todo, que el pueblo confíe en nosotros, que ahí vamos a ganar el campeonato”, nos aseguró Eduardo Blanco, el jardinero central de los Cocodrilos.

Esta historia se va del pantano a la llanura. Toros y Cocodrilos siguen dando guerra y los aficionados seguimos con el corazón que se nos quiere salir del pecho. Este fin de semana se rompe el corojo…