El Ministro del Turismo en Cuba resaltó los más de 140 proyectos establecidos como parte de la cantera de oportunidades abierta a la luz de la Ley de Inversión Extranjera.

A exactamente una semana para el inicio de la temporada alta del turismo nacional, el Ministro cubano del sector, Manuel Marrero Cruz, ofreció un balance de las principales virtudes y proyecciones del ramo para los próximos años y confirmó a los delegados a la I Convención Científica Internacional de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas la voluntad del gobierno cubano de asegurar un turismo respetuoso con el entorno.

Durante su conferencia magistral, titulada “Perspectivas y retos del turismo para garantizar el desarrollo sostenible del sector en Cuba”, Marrero Cruz compartió las cifras más actualizadas y debatió los objetivos estratégicos que guían el trabajo de una de las esferas llamadas a mantener su crecimiento y su aporte al desarrollo económico y social del país.

De acuerdo a los datos ofrecidos por el Ministro, hasta el pasado 21 de octubre llegaron a Cuba más de 3 millones 800 mil visitantes foráneos. Esa cifra, según dijo, permite aspirar a cumplir con los 4 millones 700 mil extranjeros previstos para este 2017. Del mismo modo, el titular informó de la existencia de 366 hoteles —de ellos el 69.4 por ciento con categoría de cuatro o cinco estrellas— y más de 68 mil habitaciones disponibles para enfrentar la próxima temporada alta.

“Dentro de esa gran cantidad de hoteles, tenemos más de la mitad operados mediante 88 contratos con veinte cadenas internacionales, una medida enfocada siempre a preservar nuestra propiedad sobre las instalaciones y aprovechar la experiencia de nuestrosnsocios extranjeros en la administación y captación de clientes. Ese clima de cooperación nos permite lograr importantes avances a una velocidad mucho mayor”, aseguró.

En otro momento de su intervención, el Ministro del Turismo en Cuba resaltó los más de 140 proyectos establecidos como parte de la cantera de oportunidades abierta a la luz de la Ley de Inversión Extranjera. Entre ellos, destacó los dirigidos a ampliar y renovar la planta hotelera de la nación y al desarrollo inmoviliario asociado a la construcción de campos de golf y parques temáticos con alta tecnología, una de las maneras de adaptar el sector a las nuevas tendencias internacionales y a la búsqueda de experiencias y sensaciones por parte de los clientes.

Sobre los campos de golf y sus infraestructuras asociadas, Marrero Cruz enumeró las zonas de Bellamonte, Punta Colorada, Carbonera y El Salado, ubicadas todas en el occidente del país, como las de mayores perspectivas de crecimiento para los próximos años. “En Punta Colorada tenemos uno de los proyectos más grandes de América, con una duración total de dos décadas, la construcción de una terminal de cruceros, 5 hoteles con más de mil habitaciones en total y otras veinte mil unidades inmobiliarias. Sin embargo, a pesar de su magnitud, la idea está pensada para que nos reporte paulatinos beneficios desde los primeros años, una fortaleza para hacerla sustentable”, apuntó.

En un año nombrado por la Organización Mundial del Turismo como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, el Ministro cubano garantizó a la audiencia el compromiso absoluto del sector con el cuidado del medio ambiente y el enfrentamiento al cambio climático, “la única manera de asegurar la permanencia de nuestro trabajo en el tiempo y la conservación del país para las futuras generaciones”.

“Tenemos equipos de trabajo encargados de estudiar cada una de las zonas vulnerables y desde el Consejo de Ministros analizamos cada informe para tomar las decisiones más acertadas y recientemente aprobamos el plan de medidas para enfrentar esta situación. Ahora mismo, tenemos una visión bastante cercana sobre el futuro en el 2050 o el 2100 y desde ya valoramos esos detalles para evitar construir en zonas vulnerables“, agregó.

Temas como la atención y estudio de instalaciones levantadas muy cerca de la línea de costa, la creación de una estrategia ambiental del Ministerio del Turismo, el empleo de calentadores solares y lámparas led, la colocación de plantas desalinizadoras y la recuperación de edificaciones patrimoniales forman parte, según dijo, de algunas de las medidas encaminadas a preservar la naturaleza. “También dedicamos el cinco por ciento de todas nuestras inversiones al tema ambiental y utilizamos las tres cuartas partes de todos los desechos hoteleros en la alimentación animal. Son pasos en aras de consolidar programas ecosustentables y armónicos con el entorno”.

En otro momento, Marrero Cruz centró su intervención en el impacto causado a la industria hotelera nacional por el huracán Irma y destacó la labor de la Defensa Civil y los trabajadores de las instalaciones en el cuidado de los bienes materiales y en la preservación de la vida de los más de 54 mil turistas hospedados en Cuba al paso del evento meteorológico. No obstante los daños, el Ministro reiteró el compromiso de iniciar el próximo 1 de noviembre la temporada alta con la totalidad de las instalaciones recuperadas, “porque el país cuenta con todos los recursos para garantizar cada uno de los estándares de calidad necesarios”.

Igualmente, esbozó las proyecciones de desarrollo del turismo cubano hasta 2030 y destacó como prioridades esenciales la conformación de nuevos y mejores productos, la construcción de más de 103 mil habitaciones y de hoteles de lujo en las principales ciudades del país, mejorar la comercialización y promoción de las ofertas existentes, así como generalizar el uso de las nuevas tecnologías y potenciar el turismo cultural, de eventos, de salud o de naturaleza. “Nuestro principal compromiso radica en mantener a Cuba como un destino de paz, salud y seguridad”, concluyó.

Respecto al tema del bloqueo impuesto por los Estados Unidos a Cuba, el Ministro enumeró las principales afectaciones sufridas por el sector turístico y lamentó que esa normativa impida a los ciudadanos norteamericanos visita Cuba en la misma condición en que lo hacen con el resto de naciones del mundo.

Según Marrero Cruz, la hostil medida le causa a la Isla prejuicios por más de 26 mil millones de dólares, sobre todo porque Cuba debe comprar productos e insumos necesarios en los lejanos mercados asiáticos y europeo. Igualmente, no puede acceder a las grandes compañías de publicidad y ve cómo llegan a hoteles cubanos solo el 50 por ciento de los visitantes del Caribe.

Finalmente, el Ministro confirmó la terminación de ocho hoteles en Villa Clara para el 2018 como parte de la Feria Internacional del Turismo (FITCuba), que tendrá su sede en las instalaciones de Cayo Santa María, uno de los polos turísticos de mayor crecimiento en Cuba en los últimos años.