DISCURSO PRONUNCIADO POR EL COMANDANTE FIDEL CASTRO RUZ, PRIMER SECRETARIO DEL PURSC y PRIMER MINISTRO DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO, EN LA FABRICA DE CEMENTO “TITA”, CARRETERA DE PUNTA GORDA, ORIENTE, EL 30 DE JULIO DE 1964.

 

(DEPARTAMENTO DE VERSIONES TAQUIGRAFICAS

DEL GOBIERNO REVOLUCIONARIO)

 

Compañeros trabajadores: 

 

No vamos a hacer un mitin largo, pero de todas maneras quiero decirles breves palabras.  Los discursos largos se hacen cuando las grandes concentraciones. 

Lo que sí quiero decirles es el interés que tenemos, primero, en recalcarles la importancia que tiene el trabajo que ustedes están haciendo, porque el cemento es un material básico para el desarrollo del país:  es decir, la fábrica de cemento es una industria básica para la construcción.  Del cemento dependen todas las construcciones, todas las demás fábricas, instalaciones agrícolas, servicios sociales; hasta los postes, porque los postes los vamos a empezar a hacer ahora de cemento. 

Es decir que este es un material básico, y de ahí la importancia que tiene para el país la fábrica de cemento, y de ahí también de por qué se han hecho determinados planes para la ampliación de fábricas y para la construcción de nuevas fábricas de cemento, ya que el cemento que hay actualmente no alcanza para todos los planes de construcción que nosotros tenemos.  Tenemos muchos planes de construcción:  están las necesidades de viviendas, que es una de las necesidades más grandes que tenemos. 

Nosotros hemos estado pensando cómo demonios se va a resolver el problema de la fabricación de casas, porque en el desarrollo de la industria básica es donde se invierte la mayor cantidad de cemento que se produce, así como la piedra que se produce.  Entonces, para poder ampliar la producción de casas hay que aumentar la producción de cemento, la ampliación de la producción de piedras, crear nuevos molinos de piedra, y la ampliación de la producción de fibrocemento también. 

Entonces, hay dos maneras de resolver el problema de la vivienda.  La forma más moderna de resolver el problema de la vivienda es la fábrica de casas, como esa que se va a instalar en Santiago de Cuba, pero la fábrica necesita cemento.  Si se cuenta con los materiales necesarios, hay dos maneras de fabricar casas:  la casa de ladrillo a ladrillo, el sistema ladrillo a ladrillo, que no resuelve el problema de las casas, porque no se pueden hacer 12 000 ó 15 000 casas de acuerdo con el número de obreros de la construcción que hay que utilizar.  Con la fábrica de casas sí se resuelve el problema, por la productividad que tienen los obreros en una fábrica de ese tipo.

¿Pero cuándo tendremos suficientes fábricas de esas para hacer    50 000 u 80 000 casas todos los años?  Posiblemente tardemos 10 años.  Al principio podemos comprar tres fábricas y después podremos comprar cinco fábricas todos los años hasta que tengamos 60 fábricas de esas.  Para eso necesitamos 8 ó 10 años, porque ahora se hacen un número de casas limitadas, que no alcanzan para las necesidades crecientes que hay.  Entonces tenemos el problema:  ¿Qué hace la gente cuando no hay viviendas?  Viene, agarra madera, zinc por acá, y se hace cualquier cosa. 

La idea que tenemos es desarrollar la producción de materiales y establecer un sistema que —como explicaba el otro día— en muchos lugares, granjas y pueblos, en muchos sitios, la gente se haga su propia casa, como a veces se hace, con una ayuda. 

Como ocurrió en una fábrica de bloques donde los obreros se las habían hecho. 

Entonces, estamos haciendo una especie de experimento.  Buscamos a un arquitecto para que llevara toda la cuenta de los materiales que se emplean, y las horas de trabajo que se emplean; y si los obreros se quieren hacer las casas, entonces les preguntamos quién es el que está más necesitado, y le vamos a hacer la casa al que esté más necesitado.  Esto se puede hacer en el campo, en muchos sitios, cuando la gente tiene el material se hace la casa. 

Claro, en una zona donde se establezca una industria se pueden hacer esas construcciones que hace el Ministerio de la Construcción con el sistema actual. 

Para desarrollar la producción estamos discutiendo entre el sistema de bloques y el sistema Novoa.  El sistema Novoa es ese que está en exposición en la Avenida de las Américas.  Las piezas más grandes prefabricadas se llevan y se instalan allí. 

El Ministerio de la Construcción está estudiando cuál es la solución, y posiblemente se incline por el sistema Novoa, para llevar los materiales a una granja, a un pueblo.  Después estudiaremos un sistema, como se hace en las granjas, que hay el sistema de que la vivienda corre por cuenta de la granja; en las ciudades se les pueden dar facilidades para comprar los materiales y pagarlos a largo plazo.  Entonces, el Ministerio puede hacer la parcelación y hacer las calles, las avenidas, el trazado y algunos modelos de casas, para que se hagan las casas siguiendo algunos tipos, algunos modelos.  Pero para todo eso hace falta cemento.  La producción de cemento, desde luego, no es tan fácil de resolver, como el de la piedra, que es un problema de molinos y de transporte, y el problema del cemento es de instalación. 

Ahora está construyéndose la fábrica de Nuevitas, la ampliación que se le está haciendo a la de aquí, y hay dos fábricas más.  Yo creo que necesitamos, por lo menos, si queremos resolver los problemas que tenemos de viviendas, tenemos que producir el doble del cemento que estamos produciendo.  Por esta razón esta es una industria muy importante. 

Me estaba contando el compañero administrador que están haciendo el 80% de las piezas que necesitan.  Por ahí anda un periodista que dijo que los mecánicos de Cuba eran los mejores del mundo.  La necesidad nos ha obligado a ello.  Ustedes saben las dificultades que tenemos con esas máquinas, muchas de ellas son norteamericanas.  Eso demuestra que se ha agudizado la inteligencia de los hombres; mientras más nos han tratado de apretar, más se nos ha desarrollado la habilidad, la inteligencia, el entusiasmo.  Nos han creado muchos inconvenientes, pero se ha desarrollado el cerebro del pueblo, la inteligencia del pueblo, el ingenio del pueblo, para resolver todos esos problemas. 

Estuve preguntando sobre los ladrillos de la ampliación y me dijeron los compañeros que ya estaban los ladrillos de la ampliación de la fábrica de Nuevitas.  Yo entiendo que no debe paralizarse la producción de los otros ladrillos y reemplazarlos en un momento determinado. 

Hemos visto el tipo de trabajo que se hace aquí, y vemos que es un tipo de trabajo duro, tanto los obreros que están cargando los sacos como los que están llenándolos.  El administrador me estuvo explicando que esos obreros trabajaban una hora y descansaban media hora.  Es una cosa justa, porque el tipo de trabajo es duro.

OBRERO.-  ¿Y las caretas, Fidel? 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  Por ahí están Augusto y Machadito, que son los que tienen que ver con la higiene del trabajo. 

Y les voy a decir una cosa:  que cuando tengamos la fábrica de yogur que pensamos poner en Santiago, va a ser conveniente que todos lo consuman.  Al principio lo van a confundir con la leche agria, porque muchos de ustedes son medio guajiros y creerán que es leche agria y no les gustará.  Lo mismo pasó con los peloteros, no querían consumirlo, después se tomaban seis u ocho cada uno, al final de la temporada.

¿El deporte cómo está?  

OBRERO.-  Tenemos un equipo de béisbol y algunos compañeros que están practicando la caza submarina, pero tenemos que estimular eso. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Dónde van a la pesca submarina, frente al Morro?  ¿Cuánto pescaron? 

OBRERO.-  Cogimos 396 libras en cuatro horas, un equipo de tres. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Y tú? 

OBRERO.-  Yo cogí 119 libras. 

Esta reunión nos va a servir de estímulo para desarrollar más el deporte y la cultura.  Ya estamos haciendo algunos planes para ver cómo conseguimos instrumentos. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿No les han mandado instructores de arte?  Los han mandado para el campo, para las montañas.  Todas esas cosas se organizan sobre la vida campesina, porque como no tienen cine...  ¡Se van a quedar ustedes atrasados con respecto a los campesinos!

OBRERO.-  Nosotros tenemos aquí el suficiente material humano para hacer un buen conjunto. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Qué necesitan? 

OBRERO.- Los instrumentos.

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Qué instrumentos son esos?  (SE PRODUCE UN GRAN MURMULLO) 

Bueno, bueno, que los escriban en un papelito.

¿Y las vacaciones cómo las cogen aquí?  ¿Y dónde pasan las vacaciones? 

OBRERO.-  Aquí mismo.

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Por qué no se pasan 15 días en Varadero?, todos los años hay planes que están al alcance de ustedes.  Ustedes trabajan duro aquí y deben ir a todos esos lugares. 

OBRERO.-  Muchos cogen las vacaciones y van al trabajo voluntario. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  Se van a fundir.  Cuando tenemos un trabajador de calidad hay que cuidarlo...  ¡Y la de los carnavales!  (RISAS.) 

Anteriormente las excursiones al extranjero se hacían con el 50% de los trabajadores premiados y el otro 50% como una especie de turismo.  Pero ahora el ciento por ciento debe ser para los mejores trabajadores. 

AUGUSTO MARTINEZ SANCHEZ.-  Este año salen 183. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  Son pocos.  El ciento por ciento de los viajes turísticos debe ser para premiar a los obreros más destacados (APLAUSOS). 

En los comedores habrá sus trabitas todavía, pero ya es un paso de avance la cosa de los comedores.  Creo que es un gran paso de avance, porque ahorra los viajes, da una buena comida, y hay más comida en la casa (RISAS). 

Ahora estamos tratando de resolver los problemas de la leche, estamos ordeñando hasta la última vaca Cebú de la república, y convirtiendo las vacas cebú en productoras de leche.  Se está trabajando duro en ese sentido, en todos los órdenes se está trabajando duro.  Todavía tendremos algunos años de dificultades, pero les puedo asegurar que vamos a ir adelante, pero bien.  Podemos sentirnos optimistas, hay mucha más experiencia.  Ahora se llega a cualquier lugar y no es como antes que se decía:  Aquí una cochiquera, aquí un gallinero...”  Ahora vamos racionalizándolo todo y en cada sitio sembramos lo que hay que sembrar. 

Hay un lugar, por ejemplo, que más que caña debía haber pasto, porque ahí no se puede mecanizar la producción; la caña hay que sembrarla en el llano; si se siembra pasto, esa sería una zona lechera para abastecer a esta zona que crece. 

El problema del agua y de la electricidad en Santiago están casi resueltos; ahora tenemos que impulsar el problema de las casas.  Yo les aseguro que para el primer trimestre la fábrica puede hacer 1 700 casas.  Para su distribución no hay que ver solo las necesidades, sino su comportamiento en el trabajo.  Todas esas cosas hay que tenerlas en cuenta. 

¿Qué nos falta? 

OBRERO.-  La educación. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¡Verdad!  ¿Cómo va eso de la meta del 6to grado?  ¿Cómo anda eso? 

OBRERO.-  Muy mal.  Tenemos que asegurar el problema de la asistencia.  Quiero aprovechar esta oportunidad para exhortar a los compañeros que están matriculados en los cursos básicos para que asistan efectivamente a ellos y garantizar una mayor asistencia.

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Tienen maestros? 

OBRERO.-  Sí.  Tenemos maestros obreros y otros maestros que nos han enviado. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Tienen el plan de llevar a todo el mundo a 6to grado? 

OBRERO.-  Sí, ese es nuestro plan, pero tenemos que discutir con los compañeros a ver cómo una hora antes de entrar al centro de trabajo, o una hora después, de una manera general todos los compañeros nos incorporamos a las aulas. 

OBRERO.-  No sé si fue educación o trabajo, o entre educación e industria que creó una legislación que prevé las actividades de aquellos compañeros que están en la universidad y trabajan. 

Esa legislación no sé por qué causas no contempló la facultad obrera, y hay muchos compañeros, una gran cantidad, que están interesados en la facultad obrera.  Aquí hay tres obreros en la facultad obrera. 

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¿Qué van a estudiar ustedes?  OBRERO.-  Ingeniería mecánica, si puedo llegar.

CMDTE FIDEL CASTRO.-  ¡Cómo no vas a llegar! 

Lo que plantea es una cosa razonable (APLAUSOS).  ¿Cómo se sienten ustedes en general, compañeros?  (EXCLAMACIONES DE:  ¡Bien!”) 

¡Nos alegramos mucho! 

 (LE PREGUNTAN QUE CUANDO VUELVE). 

El próximo viaje iré a otros lugares que no he ido en este.  He tenido mucho gusto en visitar la fábrica y tener este intercambio de impresiones con ustedes.  Me llevo una buena impresión, compañeros. 

¡Patria o Muerte! 

¡Venceremos!

(OVACION)