Intervención de Felipe Pérez Roque, Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, en la mesa redonda informativa, efectuada en los estudios de la Televisión Cubana, el día 20 de noviembre del 2000.

Creo que es de gran importancia para nuestro pueblo la información que a continuación voy a ofrecer.

Debo empezar diciendo que entre los meses de junio y octubre del 2000, la Dirección General de Inteligencia de nuestro país fue obteniendo diversas informaciones sobre la organización y los preparativos de un plan de atentado contra el Comandante en Jefe, concebido y financiado por la Fundación Nacional Cubano Americana, y cuya ejecución estaría a cargo del terrorista Luis Posada Carriles y otros contrarrevolucionarios con sede en Miami y Centroamérica.

Este fue el punto de partida de un largo esfuerzo de recopilación y análisis de información. Se iban tomando las medidas pertinentes, hasta la víspera de la partida de la delegación cubana hacia la Cumbre de Panamá. La decisión adoptada desde el primer instante por el compañero Fidel fue asistir a la Cumbre fueran cuales fueran los planes enemigos, denunciarlos abiertamente y enfrentarlos a la opinión pública y a las leyes internacionales, por sus monstruosos crímenes y los reiterados planes de atentado contra él en todas y cada una de las cumbres iberoamericanas. La mafia cubano americana subestimaba al pueblo y a las autoridades panameñas. Creían que allí todo sería fácil.

Entonces voy a dar unos datos cronológicos de cómo fue ocurriendo todo este proceso.

16-17 de noviembre

Entre la 1:00 y las 3:00 de la madrugada, reunión del compañero Fidel con el Jefe de la Dirección de Inteligencia cubana, general Eduardo Delgado y con el general Humberto Francis, Jefe de la Dirección General de Seguridad Personal. Cuestión fundamental en esa reunión: Si Posada Carriles permanecía todavía en Panamá. Se conocía que estaba allí desde el 5 de noviembre. En todo instante previo a la partida, la preocupación fundamental era que, según costumbre inveterada del personaje, dejara organizado el atentado y saliera del país. A esa hora de la madrugada del 17 de noviembre se comprobó su permanencia en la ciudad de Panamá.

Como parte de las indicaciones concebidas e impartidas por el compañero Fidel, estaba la de que a mí me correspondía enviar esa misma madrugada un telegrama al Embajador cubano allí en Panamá, para que citara a los principales órganos de prensa internacionales y nacionales para las 3:00 de la tarde en el hotel donde se alojaría la delegación, el día de nuestra llegada.

Por aquí tengo copia del telegrama que enviamos a Zamora, embajador de Cuba en Panamá, que dice:

Zamora:

Debes coordinar de conjunto con Ponce y los compañeros de Francis —gente nuestra que estaba allí de avanzada— lo siguiente:

Primero, preparar en el hotel, donde se aloja el Comandante, un salón que permita sostener un encuentro con aproximadamente 30 medios de prensa nacionales e internacionales.

Segundo, ese encuentro será a las 3:00 de la tarde del viernes 17. Consistirá en una declaración que él leerá ante la prensa.

Tercero, debes seleccionar y enviarme la lista de 30 medios de prensa, que deben ser seleccionados de acuerdo con su importancia y seriedad; 10 medios locales de Panamá y 20 medios internacionales, aproximadamente, tanto de televisión, radio, agencias de prensa y periódicos. Distribuiremos copia de la declaración al final.

Espero urgente propuesta de 30 medios a los que se invitarán.

Saludos,

Felipe.

Esta comunicación, por instrucciones del compañero Fidel, se envía en la madrugada a nuestro Embajador, y antes de retirarnos ya nos cercioramos de que se estaba trabajando en el cumplimiento de esta indicación.

Decisión en el plan concebido y preparado, y en las indicaciones impartidas por el compañero Fidel: que en el minuto exacto de la llegada a Panamá, que se produjo a las 11:15 de la mañana, el Jefe de nuestra Seguridad Personal se comunicara con el coronel Carlos Rodríguez, que había partido cuatro días antes, el domingo 12, para examinar la información existente y la ubicación de los terroristas, fundamentalmente la referida a la presencia y ubicación de Posada Carriles. Esa era la decisión previa, horas antes, prácticamente, de la partida de nuestra delegación.

Día 17 de noviembre

11:20 a.m. Se produce la llegada de nuestra delegación a Panamá. Recibimiento por la presidenta de la República, Mireya Moscoso en medio de la lluvia. Breves palabras a la prensa, en las que el compañero Fidel saluda al pueblo panameño y anuncia que más tarde haría una declaración pública. Esas imágenes han sido vistas por nuestro pueblo

12:40 p.m. Arribamos al hotel Caesar Park, donde se alojaría nuestra delegación y la mayoría de las delegaciones participantes.

12:50 p.m. Diez minutos después de llegar al hotel se produce una reunión del compañero Fidel con el Jefe de nuestra Seguridad Personal y el coronel Carlos Rodríguez, que estaba allí previamente, como ya he dicho. Comprobación precisa de la permanencia de Posada Carriles y demás terroristas. Actividades realizadas hasta ese instante. Selección de los datos precisos para ofrecer al secretario ejecutivo del Consejo de Seguridad Pública y Defensa Nacional, al jefe de Servicio de Protección Institucional y al jefe de la Policía de Panamá, que esperaban una reunión con nuestros compañeros previamente solicitada para las primeras horas de la tarde.

1:30 p.m. Unos minutos después de concluida esta reunión con el compañero Fidel, el general Francis y el coronel Carlos Rodríguez entregan la información pertinente a los jefes panameños, partiendo de la plena confianza en la seriedad y la profesionalidad de dichos jefes, que habían podido apreciar nuestros compañeros en sus contactos con ellos durante el período de preparación de la visita. Se les hace entrega del documento contentivo de dicha información. Se les solicita actuar con la mayor brevedad posible en las gestiones pertinentes, ya que hora y media después de este momento la delegación cubana entregaría a la prensa nacional e internacional la declaración anunciada en el aeropuerto por el compañero Fidel.

A continuación daré nombres, datos y ubicación de personas comprometidas con el plan de atentado, que fueron entregados a estos tres jefes panameños. Tengo aquí una copia del material entregado. Creo que es muy importante para nuestro pueblo conocer expresamente el contenido de este material, que no ha sido divulgado hasta ahora.

Luis Faustino Clemente Posada Carriles. Tiene 72 años. Mide 1,90 centímetros. Es de piel blanca, ojos verdes, pelo canoso. Posee cicatrices en el rostro. Tiene dificultades para hablar. Nació en Cuba.

Está residiendo en el aparthotel Coral Suites, situado en la Avenida Primera A norte, entre Segunda A norte y calle 49B oeste, El Cangrejo, Ciudad de Panamá. En la habitación 310.

Para sus comunicaciones utiliza el teléfono celular 620-4335.

Sus desplazamientos los realiza en un auto Mitsubishi, modelo Lancer color rojo. Como chofer utiliza a un joven negro panameño nombrado Pepe Hurtado, hombre de confianza de César Andrés Matamoros Chacón.

Utiliza entre otras las siguientes identidades: Ramón Medina, Ignacio Medina, Juan Ramón Medina, Ramón Medina Rodríguez, José Ramón Medina, Rivas López, Juan José Rivas, Juan José Rivas López y Julio César Dumas.

Tiene amplísimos antecedentes como terrorista. Es el autor y organizador principal del plan de atentado contra el Presidente cubano planificado para ejecutarse durante la X Cumbre Iberoamericana.

Pedro Remón Rodríguez. Tiene 55 años, aunque aparenta tener unos 40. Mide 1,80 centímetros. Es de piel blanca, ojos pardos, pelo castaño y complexión fuerte. Nació en Cuba. Tiene ciudadanía estadounidense.

Reside en 170099 NW 98 Avenida Hialeah Gardens, Florida, Estados Unidos. Apartado postal: 52-0865 Miami, Florida. Teléfono de la casa: 412-6330, del trabajo: 825-2501, y número de fax: 825-9088.

Se mantiene involucrado en planes terroristas contra Cuba. Mantiene vínculos con Luis Posada Carriles. Está involucrado desde el inicio en el plan de atentado contra el Presidente cubano, siendo uno de los principales organizadores y posiblemente uno de los ejecutores de la acción.

Antonio Iglesias Pons, conocido por "Tony". Tiene 65 años. Mide 1,69 centímetros. Constitución normal. Es de piel blanca, ojos claros, canoso, con calvicie pronunciada. Cubano, reside en Estados Unidos. Tiene ciudadanía estadounidense.

Mantiene vínculos con Luis Posada Carriles. Ha sido utilizado como emisario para llevar el dinero que utilizarían en la organización del plan de atentado contra el Presidente cubano Fidel Castro. Participó en la adquisición de los armamentos.

Es posible que no participe debido a que hace unos días sufrió un accidente cerebrovascular.

Santiago Alvarez Fernández Magriña. Tiene 61 años. Mide 1,84 centímetros. Es de piel blanca, ojos pardos, pelo castaño con una ligera calvicie. Nació en Cuba. Tiene ciudadanía estadounidense.

Reside en 1005 Belle Meade Island Drive, Miami, Florida. Teléfono celular: 588-4884; oficina: 821-3241; teléfono de la casa: 756-6115.

Ha jugado un rol importante en la organización del plan. Estaba prevista su participación en su ejecución.

César Andrés Matamoros Chacón. Tiene 63 años. Mide 1,74 centímetros. Es de piel blanca, corpulento. De pelo canoso y ojos pardos. Es velludo. Tiene bigotes y usa espejuelos. Nació en Cuba.

Reside en esquina 140 oeste y callejón sin nombre, en la planta alta de una edificación de dos pisos, Ciudad de Panamá. Es propietario de una fábrica de botes nombrada Acuarius Flexifoam, S.A, ubicada en Avenida Domingo Díaz (Tumbamuerto), esquina a calle 140 oeste sin número, frente a la empresa Cochez y Cía, Reparto Pedregal. Telefax del trabajo: 266-8797 y teléfono: 220-0324. Número de teléfono celular: 620-5559. Está construyendo un motel en la playa Gorgona y cerca tiene un ranchón de su propiedad, que vende pescado frito y tostones. En dicha playa tiene alquilada una casa.

Para llegar al mencionado motel se va por la carretera Panamericana en dirección a Costa Rica. Al llega a la señal que indica la entrada a Gorgona, dirigirse por ese camino hasta un letrero que dice Gorgona Hyatt. Tomar el camino que va hacia la derecha hasta el final.

Matamoros posee un Nissan Centra, color verde metálico del año 92, con vidrios oscuros, un jeep Cheroke blanco del 88 y un pick up Ford color carmelita del año 80.

Mantiene vínculos con Luis Posada Carriles, es uno de sus principales apoyos en Panamá para la ejecución del plan y le facilitó un auto con chofer.

Roberto Carrillo. Tiene unos 60 años. Mide 1,75 centímetros aproximadamente. Es de complexión gruesa, de piel blanca, ojos pardos, pelo canoso. Nació en Cuba. Es ciudadano panameño.

Reside en calle Mitre de Saint Malo, casa No.7, Reparto Altos del Doral, Ciudad de Panamá. Teléfono de la casa: 230-3180; teléfono celular: 618-4490 y 621-4771. Utiliza un jeep 4 x 4 Ford Explorer, de chapa 138505 color blanco. Trabaja en la empresa Casamar, ubicada en calle Lewis al final entre calle Diablo, Avenida Gaillard y calle Puerto, Balboa.

La esposa se llama Iris y trabaja en la fábrica Decofierros, ubicada en la Avenida La Pulida, entre calle 91 este y calle 93 este, Reparto Altos del Río, Distrito Río Abajo. Teléfonos: 221-7959 y 221-8044. Utiliza una camioneta pick up color blanco.

Mantienen vínculos con Luis Posada Carriles y es uno de sus principales apoyo en Panamá para la ejecución del plan. En ocasiones ha guardado armas y explosivos en su casa para los planes de Posada Carriles.

Carlos Vicente López Sánchez, conocido por Chente. Es hondureño. Tiene entre 30 y 35 años. Es delgado y tiene un defecto en el ojo derecho, usa espejuelos pequeños.

Reside en Barrios Cavanna No.1337, calle 14 Suroeste, San Pedro Sula, Honduras. Teléfono: 554-1500. Teléfono celular: 981-4976.

Mantiene vínculos con Luis Posada Carriles y es utilizado por este en tareas relacionadas con el plan.

José Hurtado, conocido por Pepe Hurtado. Es joven de la raza negra. Panameño.

Maneja el auto Mitsubishi modelo Lancer color rojo, que utiliza Luis Posada Carriles en sus movimientos en Panamá.

Es hombre de confianza de César Andrés Matamoros Chacón, quien mantiene vínculos estrechos con Posada Carriles y es uno de sus apoyos en ese país.

Esa es la información que los oficiales de la Seguridad cubana entregan a los jefes de la Seguridad panameña inmediatamente después de concluir la reunión que habían sostenido con el compañero Fidel.

Hay que decir que durante todo el período previo a la llegada de la delegación, la avanzada cubana discutió todas las cuestiones fundamentales relacionadas con la seguridad de la delegación, con las personas designadas por el Gobierno de Panamá.

En algunas declaraciones, altos funcionarios del Gobierno se han quejado de que, al llegar al aeropuerto, el compañero Fidel no le haya comunicado a la presidenta Mireya Moscoso el tema del plan de atentado. Algo absurdo, innecesario e imposible. La Presidenta había estado recibiendo a las delegaciones desde la tarde anterior y hasta en horas de la madrugada sin descanso alguno hasta ese día a las 4:00 de la tarde. Nuestros representantes de la Seguridad, como hicieron los de todas las demás delegaciones, abordaban tales temas con los oficiales de su absoluta confianza designados por ella. Habría sido ridículo abordarle este tema en el aeropuerto.

Pasadas las 3:00 de la tarde, 10 minutos después de la hora conveniada —había habido un retraso debido a dificultades con el audio allí, en el salón del hotel donde se encontraba la prensa que habíamos convocado—, se divulgó entonces la declaración con la denuncia y se llevó a cabo la conferencia de prensa por el compañero Fidel, que concluyó a las 3:50 p.m.

4:00 p.m. Terminando la conferencia de prensa y realizada la denuncia ante la prensa nacional e internacional, salimos de inmediato, acompañando al compañero Fidel, hacia la iglesia San Pablo Apóstol, en uno de cuyos nichos yacen los restos del general Omar Torrijos.

4:15 p.m. Quince minutos después de salir del hotel, llegamos a la iglesia, donde se había reunido espontáneamente un gran número de personas. Se han podido ver esas imágenes también.

4:30 p.m. Concluido el homenaje a Torrijos, homenaje íntimo del compañero Fidel allí en la cripta donde modestamente están sus restos, el Comandante en Jefe habla a las personas que se han congregado en el atrio de la iglesia y había una multitud también en las afueras que no pudo entrar. Esto es a las 4:30, está hablando el Comandante ya con aquel público entusiasta y solidario, que al conocer que Fidel estaba allí había colmado la iglesia.

4:35 p.m. Cuando llevaba cinco minutos hablando el compañero Fidel, el Jefe de la Seguridad Personal cubana, el general Francis, recibe la noticia de que Posada Carriles ha sido arrestado. Pide confirmación de la noticia. Minutos después, la información le es confirmada, que efectivamente ha sido arrestado Posada Carriles. Me lo comunica a mí que estoy parado cerca del compañero Fidel.

4:43 p.m. Mientras hablaba a la gente que estaba reunida en la iglesia, le muestro al Comandante para que conozca esa noticia, que acababa de llegar una nota. Me parecía que era imposible demorarle la información, pero él estaba hablando y esperé un momento en que le interrumpen los aplausos de la multitud y en el folletico con el programa de actividades que tenía en el bolsillo, que era el único papel a mano, saqué el bolígrafo y por el reverso escribí esta nota que está aquí: "Cogieron ya a Posada", se la pongo delante al compañero Fidel mientras lo aplaudían; él, que no ha seguido hablando porque está aplaudiendo la gente, hace una pausa, interrumpe el discurso, lee la nota y dice al público que "había recibido una muy buena noticia" —tengo anotado aquí— "que quisiera compartir con los presentes" —tengo anotado lo que en ese momento él dice—, "pero que no quiere desviar la atención del tema sobre el que le interesaba conversar en esa ocasión. Que después, cuando se conociera, entenderían la importancia de la misma".

Creo que nuestro pueblo debe comprender lo que sentíamos en ese momento los que conocíamos esa noticia, y nuestra mente puesta en los familiares aquí de los compañeros asesinados en el avión de Barbados, de tantas familias cubanas enlutadas por la acción terrorista, y el padre del joven di Celmo. Nuestra mente en ese momento volaba pensando en que había sido arrestado el autor y el responsable confeso de estos crímenes horrendos.

Con tal eficiencia habían actuado los responsables panameños de la Seguridad, que entre las 2:15 de la tarde, hora en que había concluido la reunión con ellos y las 4:30 de la tarde, es decir, en dos horas y 15 minutos habían capturado a los principales responsables del atentado.

Ocho días antes, el 9 de noviembre, la avanzada cubana, en Ciudad de Panamá, había entregado a Ramiro Jarvis, enlace de los órganos de Seguridad panameños con los servicios de inteligencia cubana a los efectos de los preparativos de la Cumbre, una lista de 55 terroristas residentes en Estados Unidos y Centroamérica, como potenciales participantes en el plan de atentado que por instrucciones de la Fundación Nacional Cubano Americana realizaría Posada Carriles. En esa lista, entregada allí por nuestros compañeros el 9 de noviembre, estaban los nombres de Guillermo Novo Sampoll y Gaspar Jiménez Escobedo, que fueron capturados —como ya se explicó— junto a Posada Carriles. Esta es una copia del material entregado el 9 de noviembre a las autoridades panameñas, con los nombres y datos de 55 terroristas residentes en Estados Unidos y Centroamérica que podrían potencialmente participar. Ahí están Gaspar Eugenio Jiménez Escobedo y Guillermo Novo Sampoll. Aparecen en este listado que ya había sido previamente entregado al enlace de la Seguridad panameña, con nuestros compañeros de Seguridad.

En horas de la noche del mismo día 17 —día de la Cumbre— y en la mañana del 18 de noviembre, se produce la detención de los cómplices de origen cubano, cuyas fichas leí aquí: César Andrés Matamoros Chacón y Roberto Carrillo, residentes en Panamá, y se produce también la detención del panameño José Hurtado, el tal Pepe Hurtado, quien servía de chofer a Posada Carriles en ese país.

El día 18 de noviembre se trabaja intensamente en las actividades de la Cumbre. Nuestro pueblo ha podido ver en la televisión el programa de actividades que cumplió la delegación y su participación en los debates. Por la noche partimos hacia la Universidad, donde nos esperaban los estudiantes, que tributaron a Fidel el recibimiento en las afueras y en el paraninfo que nuestro pueblo ha podido ver por la televisión. Desde allí se realizaron intensas gestiones por nosotros, por indicación del Comandante en Jefe, para localizar al Canciller panameño para entregarle esa misma noche del día 18 la Nota diplomática nuestra, relacionada con la extradición a Cuba de los terroristas de origen cubano capturados en Panamá, para ser juzgados en nuestro país, exponiendo en esa Nota las razones legales y demandando que bajo ningún concepto fuesen puestos en libertad. No podían ser puestos en libertad porque había que esperar, por supuesto, la realización de todos los trámites pertinentes, y dada la gravedad de los crímenes cometidos contra nuestro país que han costado numerosas víctimas.

Aquí tengo una copia de la carta que aproximadamente a las 11:00 de la noche del propio día 18, mientras transcurría el acto en el paraninfo de la Universidad, entregué al Viceministro de Relaciones Exteriores panameño —estaba al frente de los trabajos de la Cancillería, porque en ese momento no estaba localizable el Canciller panameño. Le entregamos la Nota fechada 18 de noviembre:

"El Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Cuba, saluda atentamente..." Aquí explicamos y demandamos, y con esto comienza el trámite de extradición oficialmente de estos terroristas para ser juzgados por la justicia cubana. Esa Nota es entregada en la noche antes de nuestra partida hacia Cuba.

Debo decir otros dos elementos adicionales:

El primero: En la mañana de hoy he hablado por teléfono con el canciller de Panamá, señor José Miguel Alemán, a quien le he reiterado el contenido de la Nota diplomática entregada en la noche del sábado y a quien le he reiterado nuestra solicitud de mantener en prisión a estos terroristas, como el primer paso del proceso de extradición hacia Cuba que hemos solicitado y cuya información adicional iremos entregando en el plazo requerido. Esa es una cuestión.

La segunda cuestión: En estos momentos está en curso la entrega de una Nota diplomática de la Cancillería cubana, otra nueva nota al Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Panamá, que nuestra Embajada en Panamá está entregando, en la que solicita que trasmita al Gobierno panameño en relación con la Nota que entregamos el 18 de noviembre, los siguientes hechos:

¿Cuál es la cuestión? En la Nota que entregamos el sábado en la noche aparece el nombre de Luis Posada Carriles, Guillermo Novo Sampoll, Pedro Remón Rodríguez y aparece el nombre de Manuel Díaz, que era el nombre que en ese momento se conocía como el supuesto nombre de uno de los terroristas; pero en esta Nota decimos lo siguiente:

Se ha podido determinar que la persona que aparece en la Nota mencionada con el nombre de Manuel Díaz, corresponde en realidad al connotado terrorista de origen cubano Gaspar Eugenio Jiménez Escobedo —como explicó aquí el compañero Taladrid—, con el siguiente historial delictivo:

Esta persona, es decir, Gaspar Jiménez Escobedo también ha quedado instruida de cargos por la Fiscalía General de la República de Cuba, en la Instrucción Fiscal No. 1/2000, por el delito de terrorismo y atentado denunciado por el Presidente de la Delegación cubana a la Décima Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de Iberoamérica, y es uno de los principales enlaces de este grupo con la Fundación Nacional Cubano Americana.

En vista de lo cual, el Gobierno de la República de Cuba espera que el Gobierno de Panamá tome las medidas conducentes a evitar que Gaspar Eugenio Jiménez Escobedo, al igual que Luis Faustino Clemente Posada Carriles, Guillermo Novo Sampoll y Pedro Remón Rodríguez, y otros implicados en los hechos delictivos denunciados el pasado 17 de noviembre por el Jefe de Estado y del Gobierno de la República de Cuba, Fidel Castro Ruz, puedan evadir la acción de la justicia.

La documentación probatoria de los hechos delictivos cometidos por las personas antes referidas, se presentarán en el plazo establecido a las autoridades de la República de Panamá.

El Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Cuba aprovecha la ocasión para reiterar al honorable Ministro de Relaciones Exteriores de la República de Panamá, el testimonio de su más alta consideración.

Fechada 20 de noviembre del 2000, y Nota diplomática que está siendo entregada.

Quiero finalmente expresar a nuestro pueblo, especialmente al compañero Justino di Celmo presente aquí con nosotros, a los familiares de nuestros compañeros asesinados en el avión de Barbados, a los huérfanos, a las viudas, a los padres que perdieron allí a sus hijos en la flor de su vida; a los familiares del diplomático cubano Félix García, asesinado por un comando del que formó parte uno de los que está arrestado, en Naciones Unidas en los años 70; a los familiares del compañero Artagñán Díaz, asesinado en México, y a tanto familiar, vecino y compañero de los compañeros nuestros que fueron asesinados a traición, no de frente y en el campo de batalla, sino en arteros planes mediante el uso del explosivo, mediante el uso del ataque a traición; a todos, en nombre de nuestro Gobierno, quiero expresarles la seguridad de que el Gobierno de Cuba, con el apoyo de nuestro pueblo y de la opinión pública internacional, demandará justicia, hará todo cuanto sea necesario para impedir que estos terroristas que han sido finalmente arrestados escapen nuevamente.

La diplomacia cubana, las autoridades de justicia de nuestro país, la dirección de la Revolución encabezada por el compañero Fidel, conocen bien el sufrimiento de muchas familias cubanas que tienen todo el derecho de recibir justicia por el asesinato de sus seres queridos.

Pienso que después de conocer esta amplia información, el pueblo panameño, sus autoridades, sus jefes de seguridad que tan diligente y profesionalmente actuaron, comprenderán bien la expectativa y el interés con que nuestro pueblo sigue toda esta situación.

Los familiares reclaman justicia. La comunidad internacional aprecia que existen todas las pruebas para juzgar a estos asesinos de personas civiles inocentes.

Nosotros no podremos devolverle al compañero Justino la vida de su hijo, nosotros no podremos devolverles sus familiares asesinados a nuestros compañeros. Nosotros podemos darles solidaridad, podemos dejarle claro una vez más que todos nosotros, nuestro pueblo es desde ese momento su familia. En cada uno de nosotros, el compañero Justino tiene un hijo; pero sí podemos garantizarle que no habrá manera humana posible de impedir que continuemos reclamando hasta que se haga la justicia necesaria en este caso.