DISCURSO INAUGURAL DEL GENERAL DE EJÉRCITO RAÚL CASTRO RUZ, PRESIDENTE DE LOS CONSEJOS DE ESTADO Y DE MINISTROS EN LA V CUMBRE CARICOM-CUBA

 

8 de diciembre de 2014

 

Honorable Gaston Alphonso Browne, primer ministro de Antigua y Barbuda y presidente en ejercicio de CARICOM;

Honorables Jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de CARICOM;

Su Excelencia Irwin Larocque, Secretario General de CARICOM;

Excelentísimo Señor Didacus Jules, director general de la Organización de Estados del Caribe Oriental;

Excelentísimo Señor Alfonso Múnera Cavadía, secretario general de la Asociación de Estados del Caribe:

Les doy la más cordial bienvenida y les deseo una grata estancia en nuestro país.

Nos regocija recibir a los líderes y representantes de la familia caribeña. Compartimos una historia común de colonialismo, esclavitud y luchas por la libertad, independencia y desarrollo, que es el crisol en el que se han fundido nuestras culturas. También enfrentamos retos comunes que solo podremos vencer con la más estrecha unidad y eficaz cooperación.

Este es el sentido y el propósito de estas Cumbres trienales, que celebramos: impulsar y fortalecer nuestros vínculos fraternales de colaboración, concertación y solidaridad, para avanzar en la necesaria integración latinoamericana y caribeña soñada por los Próceres de la independencia y postergada durante más de 200 años. Hoy es una necesidad vital para nuestra supervivencia.

La exitosa trayectoria de CARICOM, la participación de todos sus estados miembros y de Cuba en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y en la Asociación de Estados del Caribe, así como la membresía de algunos de nosotros en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-TCP) y a Petrocaribe, han contribuido al avance de la integración regional y debemos continuar impulsando su consolidación.

Estimados Jefes de Estado y de Gobierno e invitados:

Cada año, celebramos en este día, el aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba de los primeros cuatro Estados independientes de la Comunidad del Caribe.

Como dijera el compañero Fidel Castro Ruz, en el acto conmemorativo del 30 aniversario de este importante acontecimiento: “Probablemente, los líderes de estos países, considerados igualmente padres fundadores de la independencia de sus naciones y de la integración caribeña, Errol Barrov, de Barbados; Forbes Burnham, de Guyana; Michael Manley, de Jamaica, y Eric Williams, de Trinidad y Tobago, al decidir el establecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba, comprendían que estaban trazando el camino para lo que sería después la política exterior de la Comunidad del Caribe, que tiene hasta el día de hoy tres características fundamentales: la independencia, la valentía y la acción concertada”. Estas palabras mantienen toda su vigencia.

A 42 años de aquella audaz decisión, nos enorgullecemos de las excelentes relaciones que mantenemos con todos los países del Caribe, y en cada capital disponemos de las embajadas respectivas. Ustedes también tienen sus representaciones en La Habana, lo que se completó con la inauguración, el pasado 25 de junio, de la Embajada de San Cristóbal y Nieves, con la honrosa presencia del Primer Ministro, nuestro estimado amigo, el Muy Honorable Denzil Douglas.

Este es un buen momento para reiterar que, a pesar de las dificultades económicas y de los cambios que estamos haciendo para perfeccionar el modelo económico y social, mantendremos el compromiso de cooperar y compartir nuestros modestos logros con los hermanos del Caribe.

En la actualidad, tenemos mil 806 colaboradores en todos los países de CARICOM, de ellos mil 461 en el campo de la salud. Se han graduado 4 mil 991 jóvenes caribeños y actualmente mil 55 estudian en Cuba.

Adicionalmente, estamos colaborando con el Caribe y continuaremos haciéndolo, en la prevención y el enfrentamiento a la pandemia del ébola en el plano bilateral y en el contexto del ALBA y de la CELAC, con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La Reunión de Expertos celebrada a fines de octubre en La Habana contó con especialistas de todo el hemisferio, incluso con representantes de territorios caribeños aún dependientes. En las últimas semanas 61 funcionarios, médicos, expertos de la salud y otras esferas de los países de CARICOM han recibido entrenamiento en Cuba. En adición, se atiende la solicitud de nueve Estados de CARICOM de asistencia cubana para capacitar al personal médico de sus países.

Como pequeños estados insulares y naciones en desarrollo enfrentamos el reto de sobrevivir y avanzar en medio de un mundo convulsionado por una crisis económica global, con todas sus manifestaciones en el orden financiero, energético, ambiental y alimentario, enfermedades mortales y guerras. Reitero hoy la invariable posición de Cuba de apoyar, en todas las circunstancias, el derecho de los países pequeños y vulnerables a recibir un trato especial y diferenciado en el acceso al comercio y las inversiones.

Los desafíos del siglo XXI nos obligan a unirnos para enfrentar juntos los desastres naturales, los efectos del cambio climático, concertar enfoques sobre la agenda de desarrollo post-2015 y, en especial, para enfrentar colectivamente los mecanismos de dominación que nos impone el injusto sistema financiero internacional.

Unimos nuestras voces a las de la Comunidad del Caribe para exigir la inmediata supresión de nuestras naciones de las listas unilaterales que obstaculizan el desarrollo económico y el intercambio comercial con otros países.

La cooperación para enfrentar las consecuencias del cambio climático merece una atención especial. La elevación del nivel del mar amenaza la existencia de muchos de nuestros países. Los cada vez más frecuentes huracanes, lluvias intensas y otros fenómenos, causan grandes daños humanos y económicos. No nos queda otra opción que fortalecer la concertación para enfrentar esta realidad y mitigar el tremendo impacto que causan en los recursos hídricos, las zonas costeras y especies marinas, la diversidad biológica, la agricultura y los asentamientos humanos. Cuba tiene estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgo, e implementa el Macroproyecto “Peligros y Vulnerabilidad Costera 2050-2100”, que incluye proyectos sobre el estado de salud de los manglares y dunas costeras, evaluación de las playas, asentamientos costeros e infraestructura, experiencias que estamos dispuestos a compartir con los hermanos de CARICOM.

Tenemos mucho trabajo por delante. Como hemos anunciado, en el próximo trienio comenzarán a funcionar, con el modesto apoyo de Cuba, la Escuela Regional de Artes en Jamaica y el Centro de estimulación del desarrollo de niños, adolescentes y jóvenes con necesidades educativas especiales con sede en Guyana. Más estudiantes caribeños podrán acceder a estudios universitarios en nuestro país, en particular en la especialidad de Medicina. Ayudaremos también en la preparación de expertos de los países de CARICOM en temáticas relacionadas con la mitigación y el enfrentamiento de riesgos ante los desastres naturales, así como en la difícil etapa de recuperación posterior a estos.

Asimismo, continuaremos ofreciendo nuestra ayuda solidaria en la formación de recursos humanos y en la atención médica. En este sentido se destaca la oportunidad que otorgaremos a médicos graduados en Cuba que estén ejerciendo en sus países para que estudien una segunda especialidad de manera gratuita.

El desarrollo del comercio y las inversiones entre nuestros países sigue siendo un tema pendiente. Las dificultades con la transportación aérea y marítima en la subregión y el deterioro de nuestras economías, producto de la crisis internacional, atentan contra el avance en estos sectores. Debemos encontrar soluciones novedosas, factibles y convenientes para todos. En este sentido, acogemos con beneplácito los esfuerzos conjuntos para la actualización y revisión del Acuerdo de Comercio y Cooperación bilateral, que permitirá el libre acceso, con arancel cero, de 297 productos de países de CARICOM y de 47 de nuestro país.

Aprovecho la ocasión para reiterar nuestro firme apoyo a la justa demanda de CARICOM de compensación por parte de las potencias coloniales por los horrores de la esclavitud y al reclamo, igualmente justo, de recibir cooperación de acuerdo con su situación real y necesidades, y no sobre la base de estadísticas de ingreso per cápita que los califican esquemáticamente como países de renta media y excluyen  de flujos de recursos financieros indispensables.

Es ineludible el compromiso de apoyar la reconstrucción y el desarrollo de la hermana República de Haití, cuna de la primera revolución independentista en América Latina y el Caribe, con cuyo heroico y sufrido pueblo tenemos todos una deuda de gratitud.

Como he dicho en otras ocasiones, los cubanos agradecemos profundamente a nuestros hermanos caribeños por su vertical posición de respeto y solidaridad hacia nuestra Patria.

Jamás olvidaremos el permanente respaldo a la resolución contra el bloqueo a Cuba, así como las numerosas expresiones de solidaridad en el debate general de la Asamblea General de la ONU y en otras tribunas internacionales, rechazando la espuria inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo.

Distinguidos Jefes de Estado y de Gobierno e invitados:

En esta V Cumbre CARICOM-Cuba les propongo intercambiar ideas y propuestas viables para continuar trabajando de conjunto en el desarrollo de nuestra cooperación bilateral; en el incremento y la diversificación de nuestras relaciones económicas y comerciales; en el enfrentamiento a los retos que nos impone el mundo globalizado, injusto y desigual en que vivimos, plagado de graves problemas que amenazan la existencia de la humanidad; y sobre todo, en la manera de avanzar con pasos cada vez más sólidos hacia la imprescindible integración política, económica y social de América Latina y el Caribe. Tenemos ese deber impostergable con nuestros pueblos.

Sin más, declaro inaugurada la V Cumbre CARICOM-Cuba.

Muchas gracias.