Destrozos ocasionados por el Huracán Nate
El huracán Nate amenaza con golpear el sábado la costa central de Estados Unidos en el Golfo de México con fuertes vientos y lluvias, luego de dejar al menos 27 personas muertas y miles de damnificados en Centroamérica.

Con vientos máximos sostenidos de 130 kilómetros por hora (kph), Nate se encontraba a unos 390 kilómetros al sureste del río Misisipi, y se espera que se fortalezca antes de que llegue a tierra, dijo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) en Miami.

El CNH prevé que impacte la costa de Estados Unidos el sábado por la noche.

El sábado por la mañana, Nate, un huracán de Categoría 1, el más débil en una escala de cinco categorías utilizada por meteorólogos, se desplazaba hacia el norte-noroeste a 35 kph, un ritmo rápido que si se mantiene podría significar que la tormenta haga menos daño cuando impacte tierra.

Autoridades declararon estado de emergencia para 29 condados de Florida y los estados de Alabama, Luisiana y Misisipi, así como Nueva Orleans -devastada por el huracán Katrina en 2005- donde residentes eran evacuados a zonas seguras.

“La mayor amenaza de esta tormenta en particular no es la lluvia, sino fuertes vientos”, dijo el alcalde de Nueva Orleans, Mitch Landrieu.

Los productores petroleros y gasíferos comenzaron el jueves a evacuar a su personal de las plataformas en la zona.

Como tormenta tropical, Nate arrasó en Centroamérica con carreteras y pueblos, desbordó ríos y derribó árboles, dejando a su paso al menos 13 muertos en Nicaragua, 10 en Costa Rica, dos en Honduras y dos en El Salvador, según autoridades de protección civil. En Centroamérica también calculan una treintena de desaparecidos en la región.

En Costa Rica y en Nicaragua hay unos 25.000 damnificados por las inundaciones y varias zonas de ambos países permanecen incomunicadas por vía terrestre debido a los aludes.

Nate provocó lluvias y oleaje alto el viernes sobre la península mexicana de Yucatán, que alberga a centros turísticos como Cancún y Playa del Carmen, sin reportes inmediatos de daños de importancia.