La representante del Programa Mundial de Alimentos (PAM) en Cuba, Laura Melo
 
La Habana, 3 jul.- La representante del Programa Mundial de Alimentos (PAM) en Cuba, Laura Melo, elogió hoy la voluntad política en la isla para la mitigación y enfrentamiento a los desastres.

'Cuba en torno a su Defensa Civil ha creado un sistema orgánico, integrado, de articulación nacional, del que forman parte todas las instituciones, a todos los niveles, en los gobiernos provinciales y locales, vinculados a la gestión de riesgos y desastres', señaló la funcionaria, quien participa en el X Congreso Internacional sobre Desastres, en esta capital.

Describió a la nación caribeña como un ejemplo en el desarrollo de un amplio proyecto de políticas públicas encaminadas a disminuir el impacto negativo de eventos climatológicos, los cuales, argumentó, cada vez resultan más extremos y frecuentes.

Celebró que en el país se fortalecen aún más los mecanismos de prevención, preparación, respuesta y recuperación para reducir vulnerabilidades y evitar nuevos riesgos en tiempos de que resultan más frecuentes las tormentas, huracanes de gran intensidad, unidos a lluvias intensas y prolongados periodos de sequías.

'La experiencia de Cuba ha proporcionado minimizar las pérdidas humanas y los daños económicas', dijo Melo.

A nombre del sistema de Naciones Unidas, agradeció la organización en La Habana de ese e3ncuentro, el cual consideró de suma importancia para el mundo y para comprender su aporte a la agenda internacional de desarrollo sostenible.

Aseveró que las pérdidas cada vez mayores causadas por desastres de origen natural representan un desafío importante para las naciones, y en particular países en desarrollo.

La representante del PAM agregó que lamentablemente no tenemos vías para evitar tales fenómenos, pero se puede elevar la resiliencia ante estas amenazas con un mayor conocimiento, capacidad de adaptación y recuperación, y la eliminación de vulnerabilidades.

Se refirió, además, a la vulnerabilidad de los pequeños estados insulares ante estos fenómenos; de ahí, argumentó, la importancia de consolidar los mecanismos de trasferencia de conocimientos y promover el intercambio internacional.

Melo enfatizó en la pertinencia de adoptar estrategias efectivas para responder a las amenazas con mecanismos adaptados a las capacidades técnicas y humanas, así con tecnologías apropiadas.

Consideró que la reducción de desastres es imprescindible para alcanzar los objetivos de la agenda 2030 de desarrollo sostenible, cuyo fin es poner fin a la pobreza y el hambre en todo el mundo.