La Asamblea General de la ONU fija hoy postura sobre otro proyecto de resolución que reclama el levantamiento del bloqueo estadounidense contra Cuba, iniciativa similar a la apoyada de manera contundente por ese foro desde 1992.
En una sesión plenaria, los 193 Estados miembros de la organización se pronuncian a favor, en contra o con la abstención del texto, que recuerda el pleno apego a los principios y propósitos de la Carta de Naciones Unidas, ignorados por Washington durante más de medio siglo con su cerco económico, comercial y financiero a Cuba.
La Carta consagró hace 71 años cuestiones como la solución pacífica de controversias, la amistad y la cooperación entre los países, el respeto a la soberanía y la no injerencia en los asunto internos.
El proyecto de resolución que tiene ante sí la Asamblea en su 71 Período de Sesiones refleja preocupación por el componente extraterritorial del bloqueo -aplicado mediante la Ley Helms-Burton (1996)- el impacto de las sanciones en el pueblo cubano y su vigencia, pese al rechazo de la comunidad internacional.
Se trata de la vigesimoquinta ocasión consecutiva en que el principal órgano deliberativo de la ONU vota un documento dirigido al fin del cerco, apoyado en octubre de 2015 por 191 de los 193 miembros (solo Estados Unidos y su aliado Israel se opusieron).
La iniciativa reconoce los progresos en las relaciones entre La Habana y Washington, la visita del presidente norteamericano, Barack Obama, a Cuba y su voluntad de trabajar por la eliminación del bloqueo, un asunto que pasa por el Congreso, al convertirse en ley en 1996 con la citada Helms-Burton.
En la segunda de sus dos páginas, el proyecto insta a los países a abstenerse de promulgar medidas contrarias a la Carta de Naciones Unidas, y a abolirlas lo antes posible, en caso de ejecutarlas.
También pide al Secretario General de la ONU preparar un reporte sobre el tema para el 72 Período de Sesiones y a la Asamblea General incluirlo en su agenda provisional.
Cuba insiste en que mientras la Casa Blanca aplique las sanciones económicas, comerciales y financieras en su contra, acudirá a la Asamblea para demandar su desmantelamiento.
Durante la plenaria de hoy, los países tienen la posibilidad de intervenir, tanto en capacidad nacional como a nombre de organismos globales y regionales, para explicar su voto y postura acerca del bloqueo.
La Asamblea acoge además la presentación de un informe del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, relacionado con la implementación de la resolución adoptada el año pasado con el respaldo de 191 gobiernos y el aislado rechazo de Estados Unidos e Israel.
El documento remitido por Ban contempla la posición de la comunidad internacional, del sistema de Naciones Unidas y de otras entidades sobre el cerco mantenido por 10 presidentes norteamericanos.
Casi 160 gobiernos, la Unión Europea, la Santa Sede y más de 30 organizaciones enviaron sus criterios al Secretario General, la inmensa mayoría para criticar la unilateral medida, señalar su impacto y adelantar el apoyo al proyecto de resolución.
