Fidel Castro y Hugo Chávez con sus hijas y otros compañeros

La Habana, 22 mar (ACN) Son muchas las pasiones que desbordan el discurso del líder bolivariano Hugo Chávez: la familia, el béisbol, las Fuerzas Armadas, el culto a los próceres, a los héroes, el amor infinito a Venezuela, pero sobre todo, la vocación de ayudar al desvalido y a los enfermos.

Así lo encontramos en Génesis, uno de los cuentos más serios de un Chávez que sufre, le duele el padecimiento de la niña que agoniza porque la atención médica no es suficiente.

Él apela a la Revolución cubana y al humanismo de Fidel Castro para que los últimos días de la pequeña sean de infinita alegría y hasta pionera se hizo en Cuba.

“¡Es el infierno aquí!”, se lamenta el Presidente, que en los primeros años de su gobierno se consigue la tragedia por doquier, la nefasta herencia de la IV República.

“Como siempre, está la masa del pueblo y yo me echo encima de la masa, me abrazo con ella, sudo con ella, lloro con ella y me consigo. Porque allí está el drama, allí está el dolor, y yo quiero sentir ese dolor, porque solo ese dolor, unido con el amor que uno siente, nos dará fuerzas para luchar mil años si hubiera que luchar”, exclama el Presidente por aquellos días.

Pero Génesis no fue solo protagonista de una de las historias de Chávez, sino que le acompañó hasta el final de sus días, cuando el cáncer arreciaba, y la bandera que la pequeña le regaló volvió a ondear en las manos del líder que no olvidó la promesa de ser siempre fuerte.

Génesis

Por Hugo Chávez Frías

Es como aquella niña. ¡Ay!, aquí la llevo. Se llamaba Génesis. Un día, en un acto, me llegó corriendo entre el público. Creo que fue en el Poliedro. Fue y me abrazó. Ella tenía un cáncer en el cerebro. Y me dicen que no le queda sino un año de vida.

¿Qué hago yo por esta niña, Dios? Ella me regaló una bandera, allá la tengo y la tendré conmigo hasta el último día de mi vida, porque esa bandera es ella que está conmigo.

Ella me dijo: “Chávez, toma mi bandera”. ¡Ah! ¡Qué dolor cuando supe la realidad! Hablé con Fidel y le hicimos un plan.

La mandé pa’ Cuba con la mamá. La pasearon, la hicieron pionera. “Seremos como el Che”, dijo. Yo tengo hasta el video. Fue feliz hasta el último día de su vida. ¿Ve?, ¿qué más uno puede hacer? Es un angelito que anda por ahí cuidándonos. Allá está hecha bandera y aquí está hecha vida, Génesis.