Portada del libro: Raúl Castro y Nuestra América. 86 discursos, intervenciones y declaraciones
El libro Raúl Castro y Nuestra América. 86 discursos, intervenciones y declaraciones, se presentará el próximo viernes 8, a las 6:00 p.m., en la habanera Plaza de San Francisco. 

 

Informa el diario Granma hoy que el volumen recorre el pensamiento y la acción del Presidente de los Consejo de Estado y de Ministros, General de Ejército Raúl Castro Ruz, en favor de la integración latinoamericana y caribeña y contra las pretensiones hegemónicas imperiales en la región,
  
Esta excepcional entrega editorial es el fruto de una acuciosa investigación de Abel Enrique González Santamaría, que revisó mil 468 documentos públicos del estadista, dirigente político y jefe militar a fin de seleccionar los pronunciamientos relacionados con el tema.
 
Los 86 textos referidos a las realidades, problemas y perspectivas de esta América nuestra –explicó el escritor y politólogo, autor de la compilación- abarcan desde una entrevista de prensa que concedió en el contexto de la Reunión de Cancilleres de la OEA, en Santiago de Chile, el 24 de agosto de 1959, hasta el discurso pronunciado el 25 de enero del 2017, en República Dominicana, en la V Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
 
Estructurado cronológicamente y ordenado por décadas, el libro, asumido por la editorial Ocean Sur, permite apreciar la consecuencia y coherencia de la política de principios de la Revolución Cubana, mediante la palabra de uno de sus principales protagonistas.
  
Al introducir el volumen, González Santamaría recuerda cómo  transcurrieron más de cinco siglos de intenso batallar para que América Latina y el Caribe, por primera vez en su historia de emancipación, lograran conformar a finales del 2011 una organización puramente "nuestra americana": la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños».
  
Como premisas de la investigación se planteó las siguientes interrogantes: ¿Cómo se pudo alcanzar la integración de sus naciones? ¿Cuánto contribuyó la Revolución Cubana para lograr ese importante acontecimiento? ¿Qué habría ocurrido si Cuba hubiera aceptado el retorno a la Organización de Estados Americanos (OEA)? ¿Existiría la Celac? ¿Cuánto se avanzó en sus primeros cinco años de constitución y cuáles son sus principales desafíos? ¿Quiénes hicieron posible el sueño de los libertadores de América?
  
Aproximarse a las respuestas –expresó- representa un reto para cualquier investigador. Propongo hacerlo desde el pensamiento del más fiel seguidor de las ideas y la acción del líder más trascendente del siglo XX en América Latina y el Caribe, y quien además es su hermano de sangre, luchas y victorias: el General de Ejército Raúl Castro Ruz. Junto a Fidel, ha combatido durante más de 60 años contra la hegemonía imperial y ha perseverado en alcanzar la verdadera independencia y unidad de la Patria Grande».
  
González Santamaría consideró el libro como continuidad de otra obra anterior compilada por él: Fidel Castro y los Estados Unidos: 90 discursos, intervenciones y reflexiones, la cual vio la luz en ocasión de la celebración del cumpleaños 90 del Comandante en Jefe.
  
Estoy seguro –afirmó- de que luego de la lectura de ambas compilaciones los lectores coincidirán en que el más martiano de todos los cubanos es sin dudas Fidel Castro Ruz, así como el más fidelista de todos es Raúl Castro Ruz».
  
Haber escogido la Plaza San Francisco para la presentación del libro no es un hecho fortuito. González Santamaría pidió a Eusebio Leal la escritura del prólogo, encomienda cumplida con entrañable pasión y conocimiento de causa.
  
Eusebio es un fiel y creativo discípulo de las ideas de Fidel y Raúl, resaltó, y la plaza constituye un símbolo de la ingente obra de restauración y reanimación del patrimonio histórico y vivo de nuestra capital, que tiene en el historiador a su más decidido y consagrado misionero.
  
Además, muy cerca de la plaza, en el muelle Sierra Maestra, Raúl desembarcó luego de su viaje a Europa en 1953, poco antes de participar en la gesta del Moncada. Una placa lo recuerda.