Imagen alegórica al Día Internacional sobre la eliminación total de las armas nucleares

Ginebra, 26 sep (PL) La misión de Cuba ante la ONU en Ginebra abogó hoy por crear conciencia acerca de la amenaza que representan las armas nucleares y la necesidad de su total eliminación en el planeta.

En comunicado difundido en el Día Internacional sobre la eliminación total de las armas nucleares, la representación diplomática alentó al sistema de las Naciones Unidas, a la sociedad civil, al mundo académico, a los parlamentarios, a los medios de comunicación y a los particulares, a realizar acciones apropiadas para conmemorar esta fecha.

De acuerdo con el texto, la existencia de las armas nucleares y su posible empleo o amenaza de empleo es una grave amenaza para la humanidad.

Por tal razón, agregó, 'el desarme nuclear es una prioridad internacional y merece atención al más alto nivel posible', dado que 'la única garantía absoluta contra el empleo o amenaza del empleo de tales armas, es su prohibición y total eliminación'.

El comunicado resaltó que América Latina y el Caribe es la primera región densamente poblada del planeta establecida como Zona libre de armas nucleares, en virtud del Tratado de Tlatelolco.

Asimismo, se trata de la primera región del mundo formalmente proclamada como 'Zona de Paz', de conformidad con la Proclama adoptada por los Jefes de Estado y gobierno durante la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, celebrada en La Habana en enero de 2014.

La misión diplomática señaló que la lucha por un mundo libre de armas nucleares ha sido igualmente promovida por el Movimiento de Países No Alineados, un objetivo ratificado en su XVII Cumbre, celebrada en Isla Margarita, Venezuela.

Cuba celebró la adopción en julio último del Tratado de Prohibición de Armas Nucleares, que calificó de 'un hito en la historia de las Naciones Unidas a favor del desarme general y completo'.

Asimismo, agregó, la Conferencia Internacional de Alto Nivel de las ONU sobre el Desarme Nuclear, la primera en la historia de la organización, que deberá celebrarse a más tardar en 2018, debe ser una importante ocasión para examinar los avances logrados y para renovar los esfuerzos comunes por lograr un mundo libre de armas nucleares.