Para prolongar la vida y disminuir los fallecimientos no solo es importante llevar estilos de vida saludable y seguir a pie juntillas determinado tratamiento indicado por calificados especialistas, sino también reducir el estrés con unas buenas vacaciones de más de tres semanas; son muy importantes para ese fin y contribuyen a lograr este prometedor objetivo.
Estas vacaciones de más de tres semanas pudieran ser algo inalcanzable o difícil de alcanzar para muchas personas y sin embargo, pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, según los resultados de un estudio realizado en Finlandia.
¿Cuál estudio fue ese?
Investigadores de ese país realizaron un seguimiento durante 40 años de la evolución de más de mil ejecutivos con por lo menos un factor de riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular. La muestra se basó en los datos de 1 222 ejecutivos varones de mediana edad, nacidos entre los años 1919 y 1934.
De forma totalmente casual los voluntarios se dividieron en dos grupos, uno de control compuesto de 610 hombres y otro de intervención con 612 individuos con quien se trabajó durante cinco años.
El grupo sobre el que se actuó, o sea el grupo de intervención, tenían por lo menos un factor de riesgo de enfermedad cardiovascular como tabaquismo, presión arterial alta, colesterol o triglicéridos elevados, intolerancia a la glucosa o exceso de libras en su cuerpo.
Este grupo de intervención recibió asesoramiento verbal y por escrito cada cuatro meses para orientar a sus integrantes en cuanto a su salud con el fin de realizar actividad física aeróbica sistemática, comieran siguiendo patrón o una dieta saludable, eliminaran las libras sobrantes para lograr un peso adecuado y, por supuesto, dejaran de fumar.
Cuando estos consejos dirigidos a mejorar su salud no mostraron resultados efectivos, los integrantes de este grupo también recibieron los medicamentos que se recomendaban en estos casos como fueron los betabloquedores y los diuréticos, y los reguladores de los lípidos conocidos como clofibrato y probucol.
Por su parte, los ejecutivos del grupo de control recibieron la atención médica habitual seguida en estos casos, pero los investigadores no los vieron personalmente.
Resultados finales
Al final del experimento el riesgo de enfermedad cardiovascular se redujo en un 46 por ciento en el grupo de intervención en comparación con el de control.
Sin embargo, en el seguimiento por 15 años hecho después durante 1989, se descubrió que había habido más muertes en el grupo de intervención que en el de control y se analizaron las causas.
Conclusiones a aplicar cada persona
Llevar un estilo de vida aunque sea saludable no va a compensar tener un trabajo demasiado duro, sin vacaciones y con mucho estrés, fue a la conclusión derivada al revisar datos inéditos sobre las cantidades de trabajo, sueño y vacaciones mantenidos por los participantes.
Por eso quien desee prolongar una vida feliz, debe planificar con tiempo sus buenas y relajantes vacaciones recordando que nadie es imprescindible y sí fácilmente sustituible.