Banner alegórico al duodécimo congreso de la Asociación Nacional de Amistad Italia-Cuba
 
Parma, Italia, 9 mar (PL) Con la participación de 120 delegados en representación de unos tres mil 500 miembros agrupados en 68 círculos de todo el país, comienza hoy aquí el duodécimo congreso de la Asociación Nacional de Amistad Italia-Cuba (Anaic).

Durante tres días los asistentes al encuentro realizarán un balance del trabajo desarrollado en los últimos cuatro años, compartirán experiencias y buenas prácticas para optimizar el funcionamiento de la organización y elegirán la nueva directiva.

Una delegación encabezada por el primer vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, Elio Gámez, e integrada además por la responsable de área y especialista para Italia, Adriana Pino, participa en la reunión, la cual tiene como sede el hotel CDH Parma & Congressi.
 
El embajador de la Isla en Italia y otros funcionarios, concurren también a la cita en esta norteña ciudad italiana de remotos orígenes etruscos y celtas, devenida colonia romana en el año 183 antes de nuestra era y distinguida actualmente por su patrimonio histórico y cultural, junto al desarrollo de la industria agroalimentaria.

A las 14:00, hora local, se iniciarán las labores del congreso con los saludos de las autoridades de la ciudad, organizaciones, partidos y otros invitados, previo a la presentación del informe central por parte del presidente saliente, Sergio Marinoni.

A continuación se crearán las comisiones en las cuales se abordarán temas relacionados con política, estatutos, organización, inscripciones y solidaridad, comunicación y la electoral, en las cuales trabajarán los delegados desde las 21:00 hasta las 24:00 horas.

En declaraciones a Prensa Latina, el vicepresidente de la organización y secretario de su círculo de Roma, Marco Papacci, destacó la importancia del congreso como espacio fértil de ideas y nuevas metas, en apoyo a la Revolución Cubana, ante el recrudecimiento de la hostilidad por parte del gobierno de Estados Unidos.

La Anaic fue fundada en 1961, al calor de las manifestaciones en contra de la invasión mercenaria de Plaza Girón organizada, financiada y dirigida por Estados Unidos.

Desde entonces realiza una labor ininterrumpida de solidaridad con la Isla, insertada en el amplio movimiento progresista y antifascista italiano, con el objetivo de promover la amistad entre los pueblos de ambos países a través del conocimiento recíproco.