En Las Terrazas turismo y cultura van de la mano

La Habana,6 sep - Visitar el complejo turístico Las Terrazas, de la Sierra del Rosario, en el municipio artemiseño de Candelaria, te brinda la posibilidad de disfrutar de una interesante opción recreativa y, a la vez, conocer importantes páginas del legado histórico- cultural del lugar.

En esta serranía, muy afectada por la tala indiscriminada y la erosión y cuyos escasos habitantes vivían en extrema pobreza, la Revolución acometió un ambicioso programa de rehabilitación forestal, mediante la construcción de terrazas, que le dio nombre al lugar.

En apenas ocho años de labor se sembraron siete millones de árboles, se construyeron  20 kilómetros de carreteras y la comunidad Las Terrazas, en armonía con el entorno que la rodea, todo lo cual dio lugar a que en 1985 fuera declarada Reserva de la Biósfera por la Unesco, junto a otras áreas de la Sierra del Rosario.

 Sierra del Rosario

Como complemento  y ante la llegada del Período Especial, en la década de los noventa del siglo pasado se edificaron y pusieron en explotación el hotel Moka y otras instalaciones que propiciaron el desarrollo turístico de la comunidad.

Mientras unos habitantes proseguían enfrascados en el cultivo de plantas y flores, otros se dedicaron a cultivar manifestaciones y expresiones artísticas autóctonas, entre ellos Fernando Borrego Linares, quien en breve tiempo conquistó el público con su música y canciones.

Polo Montañés, como se hizo conocer artísticamente por su apodo y procedencia, o el Guájiro Natural, como se autodenominó en una de sus famosas composiciones, pasó a la posteridad por sus aportes a la música tradicional cubana.

Al fallecer de forma inesperada en 2002 en un accidente del tránsito, la casa de Polo pasó a formar parte del complejo, en el cual coexisten pasado y presente en un  paisaje de gran belleza e interés, conformado por ruinas de antiguas haciendas cafetaleras del siglo XIX, sitios de las luchas independentistas, un sistema de terrazas con valiosas especies de árboles, variada fauna, ríos y corredor de aves migratorias.

Conocer las virtudes de este hermoso paraje, donde se pueden apreciar en toda su magnitud los beneficios de la obra revolucionaria y el hombre, y disfrutar de sus bondades son objetivos fundamentales de las excursiones que organiza la Agencia Ecotur, de la Compañía Cubanacán S.A.

Las terrazas

Los participantes son recibidos con un cóctel de bienvenida en el Rancho Curujey y de inmediato se inicia un recorrido por las principales instalaciones del complejo, siempre acompañados del servicio de guía que explica las características de cada una.

Durante el trayecto los turistas tienen la oportunidad de apreciar y conocer detalles de la comunidad ecológica, el ecomuseo, la casa club, el bazar El Cusco con artesanías locales, talleres artísticos, la casa museo de Polo Montañez, el sitio más visitado, y hasta realizar un paseo aéreo de mil 600 metros en el Canopy, en el caso de los más arriesgados.

El recorrido concluye en el Ranchón San Juan, donde se disfruta de un almuerzo criollo, a base de asados en la parrilla,  y baño en las aguas del río de igual nombre, las mismas en que solía hacerlo el Guajiro Natural y que ahora imitan miles de sus admiradores.

Las terrazas