Ministro afirma que no hay dolarización de economía cubana y que medidas permitirán afrontar mejor unificación monetaria y cambiaria

La Habana, 17 oct (RHC) ¿El país está regresando a una dolarización de su economía?, fue una de las inquietudes que respondió Alejandro Gil Fernández, ministro de Economía y Planificación, en la Mesa Redonda de ayer miércoles. Al respecto, señaló que “mantenemos las dos monedas nacionales: CUC y CUP. Se trata de una venta en USD de determinados productos y en determinados establecimientos”. 

Durante el espacio televisivo, el ministro de Economía recordó que uno de los objetivos de las medidas anunciadas es fortalecer la industria y el comercio interno. “Esto nos pone en mejores condiciones para enfrentar la unificación monetaria y cambiaria”, dijo.

Agregó que también se aceptan otras monedas en la alimentación de las cuentas y se emplea el dólar como una moneda de referencia. 

“Se trata de ir transitando de un mecanismo centralizado en la asignación de divisas en el sistema empresarial a un mecanismo más financiero. Por ejemplo, hoy, de los ingresos por exportaciones se asignan divisas para la importación. Esos dólares entran al país y se asignan a la industria. Esto no es dolarización de la economía”, aclaró. 

El titular de Economía explicó que a partir de ahora las empresas recibirán los dólares para su reaprovechamiento y a partir de su propia gestión. “Es cierto que se incorpora otra moneda. Pero no circulará de manera efectiva. No se realizarán transacciones ni operaciones en dólares, sino que se efectuarán mediante el comercio electrónico”. 

Gil Fernández recalcó que no se trata de dolarizar la economía, sino de “crear incentivos hacia lo interno del sistema empresarial para ir transitando de mecanismos centralizados en la asignación administrativa a métodos financieros”. 

“Nosotros no tenemos la pretensión de eliminar las monedas nacionales, ni de ampliar la venta en dólares o cualquiera otra divisa en el resto del comercio. La pretensión es captar las divisas y mantenerlas en el país, que lleguen al sistema empresarial de manera centralizada para que esté en capacidad de dar respuesta a una demanda”, indicó.

“Todo lo que hacemos en función del impulso de la economía es pensando en el pueblo, buscando un camino para crear mejores condiciones para la redistribución de esas divisas captadas en beneficio de todos”, destacó Gil Fernández y agregó que con estas decisiones se pueden reactivar empleos que hoy tienen baja capacidad.  

“De la forma en que está funcionando en este momento, ni se beneficia la economía ni toda la población”, subrayó.