ordenamiento monetario

Como parte del ordenamiento monetario que comenzó este año fueron adecuados los precios a los productos agropecuarios. En cuanto a aquellos que quedaron descentralizados se decidió que las empresas de acopio o las agropecuarias y los gobiernos locales tuvieran la facultad de concertar los precios con las formas productivas, respetando en líneas generales los principios aprobados.

Para informar sobre estos cambios y los recientes intercambios con productores de todo el país, comparecen en la Mesa Redonda la titular del Ministerio de Finanzas y Precios, el presidente de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, un viceministro de la Agricultura y el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios y Forestales.

En video, la Mesa Redonda

 

 

 

No podemos aspirar a producciones donde nuestros campesinos pierdan

 
campesinos

Foto: Pastor Batista Valdés/ Invasor.

La titular de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños Weiss, comenzó su intervención destacando el intercambio sostenido con formas productivas y productores, incluidos los individuales, un recorrido por todo el país realizado por este organismo, el Ministerio de la Agricultura, la comisión de implementación de los Lineamientos, la ANAP, entre otros. 

La ministra comentó que durante tres días, del 22 al 24 de febrero, se desarrolló este intercambio, que contó muchas veces con la presencia del Segundo Secretario del Comité Central del Partido y otro grupo de dirigentes.

“Si algo primó en todos esos encuentros fue el compromiso de nuestros productores, de campesinos, de las formas productivas de continuar produciendo alimentos e incluso intensificar las producciones, aplicar la innovación y la ciencia y revisar cuánto ellos pueden transformar”, señaló.

Bolaños Weiss dijo que existe una conciencia de las limitaciones que posee el país en el orden financiero, en primer lugar por el recrudecimiento del bloqueo y las más de 240 medidas impuestas por la administración Trump en los últimos años, lo cual limita la adquisición de combustible e insumos como fertilizantes.

En ese sentido, hay un reconocimiento de la necesidad de impulsar el uso de productos nacionales, ya sea fertilizantes y piensos. “Por nosotros mismos y en nosotros mismos estarán las soluciones a los problemas”.

En los intercambios, amplió la ministra, se observó también el interés de los productores en buscar mayor racionalidad y eficiencia. “Sabemos que no es fácil, es un proceso gradual y paulatino, pero debemos buscar más eficacia”.

La titular hizo énfasis en que los productores necesitan también cubrir sus costos y mantener una utilidad para poder afrontar los gastos de la vida tras el impacto de la Tarea Ordenamiento en el orden de los precios. “No podemos aspirar a producciones agropecuarias donde nuestros productores pierdan. No tener excesivas utilidades, pero sí rendimiento”. 

En función de eso, “los intercambios que duraron hasta cuatro horas, evidenciaron que existen productores produciendo con menos de una caballería, lo que limita el uso eficiente de las maquinarias”, especificó.

 

¿Cuáles han sido las principales inquietudes planteadas por los productores?

 

Asimismo, prosiguió, ellos plantearon la necesidad de revisar las tarifas eléctricas y de abasto de agua, a partir de que trabajan hoy con equipos de bombeo que son altos consumidores de electricidad y que requieren de periódicas reparaciones.

La ministra explicó que hay una percepción de que la electricidad en las producciones agropecuarias es muy cara, y afecta los gastos en el riego y otras labores.

Otro señalamiento tiene que ver con que en las condiciones de ordenamiento, donde se produce un incremento de los costos y flujos financieros que se requieren por las formas productivas, el cobro automático de servicios de electricidad y agua a las Cooperativas de Crédito y Servicios (CCS) para liberar de determinados pagos en los productores, no tiene respaldo en los saldos de las cuentas bancarias por el incremento propio de la tarifa eléctrica y el desfase que existe en la generación del costo y cuando esté realizada la producción agrícola y se comercialice.

De acuerdo con Bolaños Weiss, también existe el criterio de que los productores deben enfrentar esos crecimientos de los costos y de flujos financieros en el corto plazo y no cuentan con el capital necesario para ello. “Realmente los créditos bancarios y servicios de seguros a los nuevos precios no se actualizaron de inmediato”.

“Ya se ha ido avanzando con los de seguros y se trabaja en el diseño de los nuevos montos que deberán tener los créditos bancarios. Evidentemente como resultado de una devaluación en el país esos flujos financieros de los ingresos y gastos de los productores se incrementan y por tanto los créditos bancarios no mantienen el mismo valor”, argumentó.

En los encuentros, continuó, se plantearon los cobros sobredimensionados de determinados servicios y trámites a los productores, por algunas empresas y formas productivas. Por ejemplo, en una provincia occidental uno de los productores expuso que por cada litro de combustible se le estaba cobrando, además de los 13 puntos, dos pesos por llevar ese servicio. “A los efectos del productor se estaba afectando y dando una utilidad excesiva al proveedor”.

Asimismo, en Matanzas un productor se quejó porque para la certificación de un tractor, que lo que lleva cuando más son dos horas de trabajo, le cobraron 350 pesos. 

La ministra subrayó la necesidad de revisar primero, la relación calidad-precio. “Segundo, los costos que estamos fijando en el traslado de los servicios a los productores. No se pueden trasladar las ineficiencias o el sobrecobro de determinados servicios”.

Otro de los planteamientos fueron de las cooperativas que no tienen capacidad financiera para enfrentar los crecimientos de precios y tarifas por insuficiencias productivas. Muchas de ellas, no por el ordenamiento, sino por viejas carencias.

La titular abundó que surgieron preocupaciones de por qué los precios de los servicios e insumos crecen más veces que el crecimiento del precio de sus producciones. “Esto tiene que ver también con el rendimiento de las producciones, dígase por tonelada o quintal, incluso materias primas e insumos”.

Por otra parte, existe mucha preocupación sobre el acarreo de leche para el que se demanda de pagos superiores al que se estableció, para las personas que prestan este servicio. “Dentro del precio del litro de leche se contará el pago al acarreador que no precisamente es quien produce. Estamos planteando ratificar la independencia de ese servicio”.

Igualmente, algunas formas productivas expresaron que no tenían suficiente información sobre las adecuaciones tributarias, así como que se revise el pago de impuestos en las CPA buscando equiparar las condiciones de una manera más igualitaria.

En esencia, resumió, hubo más de 200 consideraciones y una amplia participación de los productores.

Se ajustan los precios algunos servicios y productos

 
También a las tareas de la agricultura se suman los jóvenes en tiempos de COVID-19. Fotos: Cortesía de la UJC.

La ministra informó que luego del análisis por todos los organismos implicados y de revisar un grupo de servicios que inciden en los costos (agua, electricidad, aviación, acarreo, enfriamiento de la leche) se hicieron una serie de ajustes sobre las decisiones previamente aprobadas.

Ratificó que se mantienen solo con precio de acopio centralizado los productos que tienen un alto impacto en el consumo social y en la sustitución de importaciones: 

  • Arroz con cáscara y consumo.
  • Frijoles(negro, colorado).
  • Leche fresca de vaca.
  • Ganado vacuno en pie.
  • Tabaco.
    Caña de azúcar.
  • Café (arábico y robusta).
  • Maíz seco en grano.
  • Huevos frescos de gallina.
  • Cerdo en pie.
  • Papa

Hay otro grupo de productos a los que se les aplicarán en su comercialización “precios duales” porque tienen dos destinos. “En el primer destino: consumo social y las dietas médicas, se mantendrían los precios de acopio centralizados”.

Especificó que los productos para el consumo social son aquellos destinados a los hospitales, escuelas, comedores obreros y a los sistemas de atención a la familia.

A la par, dijo, se tomó la decisión de liberar y descentralizar el precio de compra de esas producciones cuando sean concertados por gobiernos locales o entidades facultadas para ello en función del comercio minorista. “Pero lo primero que tenemos que asegurar es el cumplimiento de esas contrataciones que van al consumo social y toma una particular relevancia la contratación con nuestros productores”.

●Malanga Xanthosoma.

●Malanga colocasia.

●Plátano vianda.

●Plátano burro.

●Plátano fruta.

●Boniato   (se incrementa).

●Mango.

●Guayaba.

●Fruta Bomba.

●Tomate.

En el caso del boniato, este incrementa su precio centralizado de acopio (20 pesos el quintal o 400 la tonelada), motivado por las revisiones realizadas tras tomar en cuenta  el parecer de los productores. 

El precio de las frutas, puntualizó la ministra, pone en mejores condiciones a las industrias procesadoras de estos productos, para los jugos y compotas que se destinan a la canasta familiar normada, por ejemplo.

¿Qué costos cambian en beneficio de las producciones?

 
La reducción de estas tarifas significa un financiamiento adicional del presupuesto del Estado por 242 000 000 de pesos.

 

Bolaños Weiss explicó que los costos para todas las producciones se benefician con una reducción de la tarifa del agua en un 32% con respecto al inicio del año, así como una disminución de la tarifa eléctrica para regadíos y otras actividades de la producción agropecuaria, entre un 28 y 25%.

Además, se reduce también un 22% la tarifa de aviación en la producción de arroz y en los piensos nacionales para la producción porcina al 60%. “Esta última también tiene un costo importante para el presupuesto, porque en lo que la industria de pienso sigue ajustando sus precios y producciones, tiene que recurrir a la ayuda del presupuesto del Estado, un poco más de mil millones de pesos”.

La ministra acotó que estos beneficios se aplican a las operaciones realizadas desde el mes de enero. Por tanto, en lo adelante, emitidas las normas jurídicas e implementadas, tienen que haber las fórmulas financieras de facturar compensaciones y aquellos casos que tengan que rectificarse.

La reducción de estas tarifas significa un financiamiento adicional del presupuesto del Estado por 242 000 000 de pesos. “No podemos seguir rebajando costos porque tenemos un presupuesto que es finito y el diseño del ordenamiento implica que estos servicios que demandan mucho combustible importado en las condiciones de Cuba, se encarece más su adquisición, y llega un momento en que no se pueden seguir incrementando los costos”.

tarifas

Sobre el precio del arroz de cáscara húmedo, los productores, que tienen un compromiso de 170 000 toneladas este año, plantearon su inconformidad con los elevados precios de los insumos y servicios.

Tras la revisión de fichas de costo, especialmente en las empresas arroceras, se identificaron gastos superiores a los modelados inicialmente y por los servicios prestados que representan el 36% de los gastos totales de los productores.

En función de esto, la titular del MFP informó que se decidió incrementar en 1 483 pesos el precio de acopio, el que resulta en 6 922 pesos por tonelada; 318.40 pesos por quintal. “Manteniendo la utilidad de antes de la Tarea Ordenamiento que es de 1 354 pesos por tonelada”.

Esto representa un aumento del financiamiento del presupuesto del Estado a 470 000 000 de pesos, valorado con un rendimiento promedio de 4.35 toneladas por hectáreas. “Por tanto, el productor que busque eficiencia y obtenga por hectárea más de 4.35 toneladas ganará mucho más”.

También se pondrá un límite máximo de los servicios productivos que prestan las empresas arroceras que no deben rebasar el 36% de los gastos totales.

Con el precio de la leche, acarreo y frío, los productores refieren que el precio de la leche, aunque no provoca pérdidas, existen preocupaciones en función de los gastos y las condiciones en que realizan el acarreo.

Se ha decidido mantener el precio de 7.50 pesos por producir un litro de leche de calidad máxima. El acarreo y el servicio de enfriamiento se pagarán de forma independiente al precio del litro de leche al productor, también beneficiado con todos los costos explicados anteriormente.

Igualmente, se pagará una tarifa de acarreo de la leche fresca, desde el productor hasta el punto convenido, según se relacionan a continuación:

–Desde uno hasta cuatro km, 15 centavos por litro.

–Más de cuatro y hasta ocho km, 30 centavos por litro.

–Más de ocho km, 40 centavos por litro.

El presupuesto del Estado financia a la industria el pago del acarreo por 100 000 000 de pesos, mientras la Industria Alimentaria asumirá el gasto que sobrepase el financiamiento asignado. Por tanto, “se deberá organizar eficientemente el proceso, incluyendo las distancias a recorrer y revisión de las rutas”, señaló.

En el enfriamiento se incrementa el pago a la forma productiva de 15 centavos a 25 centavos por litro de leche fría hasta cinco horas de frío, como tarifa máxima, debido a los gastos de electricidad.

La empresa láctea deberá pactar con las formas productivas (CPA, CSS ó UBPC) los horarios de recogida y el pago por este servicios cuando se exceda el término de recogida pactados. Si excede de cinco horas hay un costo en la generación de energía por parte de esta forma productiva que presta el servicio que no debería asumirlo y tendría que pactarse.

La titular argumentó que también hay un cambio en las categorías del ganado vacuno en pie. Se identifica que es necesario diferenciar los pesos en algunas categorías, que ofrecen mejores resultados de procesamiento industrial.

Por ejemplo, ajustar el contenido ruminal a descontar del peso del animal. Esta propuesta no demanda financiamiento del presupuesto del Estado y no afecta los costos de los productores ni desfavorece los precios de compra, sino que favorece que pueda darse una mejor comercialización en dependencia del peso.

La ministra anunció que se sigue trabajando en una evaluación de las tarifas por trámite hacia los productores. “Es importante hacer los estudios de cómo se van comportando tarifas que hoy están descentralizadas, pero que debemos monitorear”.

 

La ANAP respalda las medidas adoptadas y continuará fomentando el vínculo hasta los productores

 
Santiesteban Pozo abundó que a partir de este movimiento la ANAP trabaja de conjunto con el MINAG para socializar y extender los resultados, de forma directa, en el campo y mostrando ejemplos concretos.

 

Rafael Santiesteban Pozo, presidente nacional de la ANAP, al comparecer este lunes en la Mesa Redonda significó el impacto de estas decisiones desde la perspectiva de los productores y, en especial, compartió sus valoraciones sobre los análisis realizados desde la ANAP, a partir de los intercambios.

Con estas decisiones y el proceso de intercambio con la base productiva, “se demuestra el respaldo de la dirección del país al sector agropecuario, al tener en cuenta los puntos de vista, lo que se viene haciendo y la experiencia que se va acumulando en este período”, destacó.

“Esto representa una muestra de confianza, pero también un alto compromiso para que no se detenga nada de lo que se ha venido logrando, de lo que hay que seguir transformando en todos los lugares, con el objetivo de incrementar los resultados”.

“Estamos frente a un proceso de continuidad, lo que exige incrementar el trabajo, la eficiencia y el aporte, en el orden individual y colectivo”, subrayó. No obstante, se perfila un antes y un después de la implementación de la Tarea Ordenamiento, toda vez que requiere buscar las reservas desde el punto de vista de la productividad y la eficiencia.

Prioridad esta última que se traduce a todos los territorios, de acuerdo con las características de estos, tanto por parte de las cooperativas como por cada uno de los productores. Además, afianzando el concepto de que se trata de una tarea de todos y nadie está exonerado de esta responsabilidad. “En la misma sumatoria, en el orden individual y colectivo, será posible incrementar los resultados”, acotó.

Subrayó que la ANAP respalda las medidas adoptadas y continuará fomentando el vínculo hasta los productores, “donde se afianza hoy más que nunca la actitud solidaria y comprometida para enfrentar las limitaciones e incrementar los resultados”.

Este ha sido un principio del proceso —insistió el titular de la organización campesina— y se ha constatado, en los propios intercambios, la voluntad para seguir interactuando y compartiendo experiencias de buenas prácticas en los diferentes lugares. “Lo anterior con la seguridad de que el país continuará enfrentando las dificultades, desde la búsqueda de alternativas que permitan avanzar como nación”.

En esta última etapa, agregó, el Buró Nacional de la ANAP ha transmitido —mediante visitas directas, intercambios y documentos— las acciones a realizar para lograr una mayor gestión del proceso productivo; un enfoque más integral, oportuno, actualizado y que lógicamente ponga en mejores condiciones a productores y cooperativas.

Santiesteban Pozo comentó que actualmente se efectúan, a nivel de zonas o municipios, talleres de intercambios de experiencias con los principales representantes de las direcciones de las cooperativas y de las organizaciones de base. “Esto con el supuesto de ir evaluando aquellas experiencias y los mejores ejemplos de lo que se ha venido alcanzado, de modo que se puedan extender e ir generalizando”.

Grosso modo, el quid está en conjugar prioridades: el impacto que se necesita en el propio funcionamiento de las cooperativas y en el trabajo integral de los productores. En ese tema, “se ha estado insistiendo mucho en aumentar la capacidad de hacer, de transformar, de adecuar en base a los recursos que tenemos en las formas productivas en las condiciones actuales; y cómo podemos aprovecharlos de una mejor manera, más oportuna, para que tenga un impacto superior en términos de producción y de logros económicos”.

En estas condiciones, argumentó, no se debe pasar por alto el efecto incrementado, el impacto desde el punto de vista negativo que ha tenido en el último período el bloqueo impuesto por Estados Unidos, sobre todo en cuanto al aseguramiento de los insumos productivos para el sector agropecuario. “El esfuerzo que se ha venido realizando y desarrollando debe ser aún mayor para encarar las dificultades derivadas de esa medida arbitraria contra Cuba”.

El presidente de la ANAP enfatizó en que resulta clave enfrentar esos factores objetivos, junto a otros de naturaleza subjetiva, en el camino de avanzar hacia las proyecciones del país a la luz de la Tarea Ordenamiento, en favor de la alimentación del pueblo y de la economía del país.

Asimismo, Santiesteban Pozo ponderó la pertinencia de seguir aplicando la ciencia y la innovación en la producción de alimentos en Cuba. Sobre este particular, resaltó también prácticas que requieren mayor aplicación, como la tracción animal, la agroecología, el uso de los bioproductos y el ahorro como fuente de ingresos.

Igualmente constituye una prioridad la optimización del recurso suelo, con énfasis en la siembra de áreas agrícolas cada vez mayor, debido a la existencia de afectaciones a los rendimientos, si bien se reconocen los esfuerzos en cada instancia. “Se han dado pasos pero no es suficiente”, reconoció.

En la anterior campaña de frío, dijo, se sobrecumplió la siembra, un volumen importante para esta campaña de primavera y —según los planes— se debe producir un incremento también. “Pero desde el MINAG y la ANAP se ha estado convocando de cara a ese esfuerzo adicional que redunde en aprovechar al máximo cada fondo de tierra y seguir incrementando las siembras”.

Comentó que no contar con los volúmenes requeridos de fertilizantes, supone que se precise de explotar en mayor medida las áreas cultivables para tratar de mantener cosechas similares, dado el menor rendimiento. “Urge avanzar en este sentido en función de acercar el sector a las necesidades del pueblo y de la economía del país”.

Como respuesta a la implementación de la Tarea Ordenamiento, es importante continuar incrementando el autoabastecimiento, la estructura de los cultivos y las crianzas con alimentación propia.

“En el caso del autoabastecimiento, esto implica al producto, a la familia, a la cooperativa. E implica el aporte colectivo a este Plan de Autoabastecimiento Municipal, que es un programa integral del Gobierno dirigido a satisfacer las necesidades locales de alimentación en correspondencia con las características específicas de cada una de las zonas y los municipios”.

En resumen, aprovechar de una forma más eficiente los recursos disponibles, iniciando por los recursos humanos y pasando por todos los eslabones de la cadena que participan e influyen en la producción de alimentos.

El presidente de la ANAP se refirió al avance experimentado en materia de la recuperación de los módulos pecuarios que se entregan a las cooperativas, con alimentación propia e incorporando un grupo de crianzas y tecnologías productivas, las cuales tienen un respaldo en el conocimiento, en la responsabilidad que hay de buscar alternativas.

Este es un tópico en el cual se avanza, reiteró, aun cuando no se hace con la agilidad necesaria. De ahí que se sigan creando las condiciones para incrementar los aportes.

Dentro de los aspectos esenciales para dar el salto esperado en el sector, mencionó la urgencia de trabajar en la calidad de las semillas con aplicación de la ciencia. Si se utilizan semillas de mayor potencial productivo, dijo, existen mayores posibilidades de aumentar producciones.

El intercalamiento y el policultivo se suman a esa lista de acciones prioritarias, lo cual responde al mayor aprovechamiento de los fondos de tierra con potencial para la Agricultura. “Hay una buena cantidad de productores y de cooperativas que vienen aplicando dichas técnicas y es algo que se ha venido incentivando en la misma área física, con el mismo nivel de recursos utilizando alternativas”.

En la misma medida en que se incrementen estos cultivos, esto estribaría en impactos en el orden productivo y económico.

Abundó en lo estratégico de trabajar con los productores del movimiento Avanzada, que hoy de forma general reúne a más de 24 000 en todo el país. Durante los meses de enero y febrero se desarrolló un proceso de actualización. “Estamos hablando de productores que abarcan todas las categorías productivas, constituyen referentes y han venido trabajando con la fuerza del buen hacer, la innovación y la ciencia, actuando oportunamente, más allá de las limitaciones”.

Santiesteban Pozo abundó que a partir de este movimiento la ANAP trabaja de conjunto con el MINAG para socializar y extender los resultados, de forma directa, en el campo y mostrando ejemplos concretos.

Sobre las medidas adoptadas, dijo que en su puesta en práctica se requiere de mayor disciplina. “Otro elemento cardinal es la motivación y la atención a quienes tienen la responsabilidad de garantizar alimentos desde el campo”.

“Es necesario fomentar la cultura de trabajar más, y trabajar con más calidad”, enfatizó. El avance depende de un grupo de factores, pero —en primer lugar— de los recursos humanos. “Depende de la capacidad para, de forma integral, conducir los procesos y lograr un acompañamiento, un mayor nivel de conducción, exigencia e intencionalidad en los diferentes procesos que se ejecutan alrededor del sector agropecuario y de la parte económica de forma general”.

En los intercambios con los productores se ha reiterado la necesidad de saber generar para poder tener. “Es un principio que, en el sector agropecuario, se ha estado afianzando: la riqueza, la prosperidad y el desarrollo dependen de un grupo de medidas que necesitamos seguir encauzando en el orden individual y colectivo. ¿Con qué fin? Mayor impacto en la alimentación de los cubanos, diversificación productiva y en los programas priorizados de la economía, que tienen que ver con la sustitución de importaciones y el incremento de las exportaciones. Y bajo el principio de producir más y aportar más también a todos los destinos”.

En cuanto a las transformaciones en la comercialización de productos agropecuarios, Santiesteban Pozo destacó la necesidad de mayor calidad en los planes de producción, en la contratación, así como la influencia efectiva en el aporte al consumo y otros destinos.

“Hoy, más que nunca, hay que fomentar la solidaridad, el compromiso, la intencionalidad”. Todos los destinos son importantes, explicó, pero el consumo social tiene una alta sensibilidad porque defiende las conquistas. No podemos desprotegerlo, indicó. Por el contrario, tenemos que seguir aportando con la diversidad de rubros y la calidad que se demanda.

“En los momentos actuales los campesinos cubanos continuarán —desde el surco—fomentando la unidad, que es un elemento base sobre el cual se ha seguido trabajando”. Reforzó la idea de cómo la puesta en marcha de la Tarea Ordenamiento ha colocado sobre la mesa un grupo de elementos que obliga “a trabajar con más coherencia, con la participación de todos los factores, un mayor nivel de integralidad y afianzando el compromiso de seguir adelante, siempre fieles a la defensa permanente de nuestra Revolución.

“Y ese ha sido el papel que siempre ha jugado el campesinado cubano, que juega en las condiciones actuales con mucha disposición y voluntad de seguir aportando y trabajando. Con mucho agradecimiento y confianza en el presente y futuro de nuestra Revolución”, valoró.

 

Cambios no relacionados con los precios

 

De acuerdo a Maury Hechavarría Bermúdez, viceministro de la Agricultura, el país ha tomado un grupo de decisiones no vinculadas a los precios de compra de los productos que también favorecen a los campesinos. Entre ellas mencionó la eliminación del cobro automático de los servicios de electricidad y agua.

A su vez, se decidió el ajuste de las tarifas correspondientes a los meses de enero, febrero y marzo y su cobro de forma retroactiva a partir de las nuevas disposiciones.

“También se diseñarán alternativas para bancarizar el cobro de los servicios y las facilidades para realizar el cobro a través de las cooperativas. Igualmente, el sistema bancario debe diseñar servicios para las formas productivas que se ajusten a las nuevas necesidades de flujos a corto plazo en las condiciones del Ordenamiento Monetario”, apuntó.

De igual manera, se avanza en la revisión por parte del Ministerio de la Agricultura, los grupos empresariales y las Juntas Directivas, para ajustar el precio de los servicios brindados a las formas productivas, ajustando las tarifas a las condiciones de costos. Asimismo, también prosigue la evaluación de las condiciones financieras y organizativas de las cooperativas para ayudar a detectar problemas.

“Para ello se creó un grupo temporal de trabajo integrado por 15 organismos perteneciente a nuestro ministerio, a la academia y a otros sectores, que estudiará 3 mil 245 cooperativas con dificultades para elaborar y proponer las medidas a seguir con ellas”, agregó.

Maury Hechavarría Bermúdez también comentó que actualmente se labora en el estudio de otros temas que también pudieran contribuir a mejorar el trabajo de las cooperativas. Entre ellos, mencionó la revisión de los precios del cacao y tabaco, que serán presentados por los Grupos Empresariales Tabacuba y Agroforestal al Ministerio de la Agricultura y de Finanzas y Precios en el mes de mayo.

También continúan los análisis de los aportes al Presupuesto del Estado, que corresponden a las Cooperativas de Producción Cooperativa, por la aplicación de la escala progresiva. Por su parte, el seguimiento a la situación que presentan las empresas y cooperativas para poder acceder a los créditos puentes para capital de trabajo es otro asunto que capta la atención.

La situación de 158 empresas que cerraron con pérdidas el mes de enero forma parte también de los análisis. A juicio del viceministro de Agricultura, todas las medidas explicadas exigen al sistema empresarial un rediseño en su modelo de gestión, dirigido a alcanzar mayor eficiencia.

Entre ellas, mencionó que las empresas deben priorizar las 43 medidas aprobadas para el fortalecimiento del sistema empresarial y las 24 de la Estrategia Económica y Social, mientras se trabaja en un grupo de medidas específicas del sistema de la agricultura para potenciar el desarrollo agroindustrial de las empresas y la recuperación de las producciones propias.

Finalmente, también comentó la necesidad de fomentar el desarrollo de las exportaciones y las ventas en el mercado interno en MLC, así como el encadenamiento con la industria nacional, con vistas a depender cada vez menos de la importación de insumos productivos.

Por su parte, Néstor Bárbaro Hernández Martínez, Secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros, explicó que en asambleas con los trabajadores surgieron 143 inquietudes, de ellas 72 en el ámbito de los precios.

“Evaluamos cada tema y cada día monitoreamos lo aprobado en los colectivos. La capacitación a dirigentes y a nuestros campesinos es otro de los asuntos imprescindibles. Lo más importante es que lo hacemos seguros de que siempre cada inquietud encontrará una respuesta de la dirección del país”, concluyó.

 

Está previsto un segundo intercambio con las formas productivas y productores

 

En los minutos finales de la Mesa Redonda la titular de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños Weiss, ratificó que esto es una muestra más de la unidad de nuestro proceso de ordenamiento donde se entrelaza el gobierno con el campesinado y organizaciones en busca de un bien común. 

“En la búsqueda de la eficiencia y la prioridad que tiene la producción de alimentos para el pueblo, esto da continuidad a algo que iniciamos, pero que no hemos concluido. Tendremos que seguir monitoreando”.

Recalcó a los productores que la medida de la reducción de los costos de las producciones de servicios y empresas, los nuevos precios y otras decisiones, se aplican desde el mes de enero. Por tanto, los organismos están ultimando los detalles para implementar ese necesario ajuste para compensar y pagar la diferencia a productores que ya entregaron o cosecharon. 

Asimismo, la ministra enfatizó en la necesidad de continuar utilizando plaguicidas y productos nacionales. “En las condiciones de nuestro país necesitamos soberanía en ese sentido”.

“Muy importante —señaló— la responsabilidad social de nuestros productores agropecuarios en el cumplimiento de esas contrataciones que tienen que venir precedidas de un buen proceso de concertación de contratos y cumplimiento de los compromisos de ese consumo social, que se complementa con la política de comercialización de los productos agropecuarios aprobados por el país y que será implementada en breve, y una vez emitidas las normativas”.

Bolaños Weiss insistió que esto es un proceso que implica continuar revisando y ajustando para lograr una mayor eficacia y eficiencia en los servicios que se le prestan a nuestros productores y campesinos, sobre todo por parte de las empresas.

Al concluir, la ministra informó que está previsto un segundo intercambio con las formas productivas y productores para evaluar el impacto de estas medidas y el cumplimiento de contrataciones, así cómo cuánto más hay que hacer para lograr una mayor eficiencia.