Reunión del Grupo Temporal Nacional de enfrentamiento a la COVID-19. Enero 15, 2021 - Foto: Estudios Revolución

En Cuba tres provincias –incluyendo a todos sus municipios-, pasan a la Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada de la COVID-19: Matanzas, Santiago de Cuba y Guantánamo.

El anuncio fue hecho en la tarde de este viernes por el viceprimer ministro, Roberto Morales Ojeda, durante la reunión del Grupo Temporal de Trabajo para la Prevención y Control del nuevo coronavirus, la cual fue dirigida por el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, el Segundo Secretario del Comité Central del Partido Comunista, José Ramón Machado Ventura, y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz.

Durante el encuentro que tuvo lugar en el Palacio de la Revolución, Morales Ojeda informó, además, que en lo referente a la provincia de Pinar del Río –actualmente en Fase I de la Etapa de Recuperación- se ha decidido que el municipio capital (antes en la Etapa Recuperativa, Fase I) pase a la Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada.

En cuanto a la provincia de Artemisa, que se encuentra en la Fase I de la Etapa de Recuperación, el municipio de San Antonio de los Baños (antes en la Fase III de la Etapa de Recuperación) pasa a la Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada. Mientras, los municipios de San Cristóbal y de Mariel (que se encontraban en Nueva Normalidad), pasan a la Fase II de la Etapa Recuperativa.

Del mismo territorio occidental, los municipios de Güira de Melena y de Caimito (los cuales estaban en Nueva Normalidad), retroceden a la Fase III de la Etapa de Recuperación.

Por su parte en la provincia de Mayabeque –actualmente en Fase I de la Etapa de Recuperación- el municipio de Jaruco pasa a la Fase II de la Etapa de Recuperación. Y en la provincia de Villa Clara, que se encuentra en Fase I de la Etapa de Recuperación, los municipios de Camajuaní y de Ranchuelo (antes en Nueva Normalidad), pasan a la Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada.

En cuanto a la provincia de Ciego de Ávila –que se encontraba en la Etapa de Nueva Normalidad-, ese territorio retrocede a la Fase III de la Etapa de Recuperación. Y allí, el municipio del mismo nombre regresa a Fase II de la Etapa de Recuperación; al tiempo que los municipios de Morón y de Majagua pasan a la Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada.

También Camagüey –provincia en Fase III de la Etapa de Recuperación- tiene municipios que experimentan cambios: el que tiene igual nombre que el territorio retorna a Etapa Epidémica en la Fase de Transmisión Autóctona Limitada; y el municipio de Jimaguayú, antes en Nueva Normalidad, pasa a Fase II de la Etapa de Recuperación.

En la provincia de Holguín, actualmente en Etapa de Nueva Normalidad, el municipio de Banes pasa a Fase III de la Etapa de Recuperación.

A propósito de un escenario que se ha complejizado -mientras la ciencia cubana lucha a brazo partido para que los protocolos médicos sean más eficaces y el día de inmunizarnos esté cada vez más cercano- el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, expresó la necesidad de actuar diferente, de que los principales responsables en esta batalla contra la COVID-19 cambien incluso el lenguaje, se despojen de formalismos y se concentren en los problemas esenciales.

En el informe presentado al Grupo Temporal de Trabajo para la Prevención y Control de la COVID-19, el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, apuntó que en los últimos quince días la cifra de casos confirmados en Cuba asciende a 4 mil 166 para una tasa de incidencia de 37,19 por cada cien mil habitantes.

En el país caribeño, según detalló el titular de Salud, se han reportado 17 096 casos confirmados desde el mes de marzo; de los cuales 16 436 son cubanos; y 660, extranjeros. Dijo, además, que se mantienen activos 3 960; y suman 162 los fallecidos para una letalidad del 0,95 por ciento.

Según informó Portal Miranda, las provincias que presentan mayor tasa de incidencia de casos positivos de COVID-19 en los últimos 15 días son Guantánamo, Matanzas, Santiago de Cuba, La Habana, Villa Clara y Artemisa.

Así es la situación en la Isla mientras en el planeta, según expuso el ministro de Salud, hasta este 14 de enero se reportaron 189 países con casos de COVID-19, y la cifra de casos confirmados ascendía a más de 93 millones (con crecimiento por día de cientos de miles), así como más de 21 252 000 casos activos, y una cifra de fallecidos que ya está muy cerca de los dos millones para una letalidad del 2,14 por ciento.  

Análisis transparentes y preguntas imprescindibles

En un estilo que cruza fuentes de información, que contrasta cifras y estados de opinión, que pide a todos estar muy atentos, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, fue dialogando mediante videoconferencia con directivos del sistema de Salud en las provincias, para conocer de primera mano qué se hace en este minuto de combate contra el nuevo coronavirus.

De La Habana, por ejemplo, quiso saber sobre cuántas camas hay disponibles para asumir los nuevos casos positivos. En ese punto hizo énfasis en la necesidad de conocer al detalle la capacidad por provincias, así como cuál es la estrategia de cada territorio para revertir los escenarios epidemiológicos desfavorables.

El Gobernador de la capital, Reinaldo García Zapata, afirmó que las autoridades responsables están haciendo análisis diarios de tales capacidades, “para que nada nos sorprenda”.

Se sucedieron los intercambios con la provincia de Santiago de Cuba –donde la situación epidemiológica está tensa y se trabaja con intensidad para revertirla-; con Matanzas, donde también se pulsa cada 24 horas el tema de las capacidades disponibles, el funcionamiento de la Atención Primaria de Salud o el uso de los insumos sanitarios; o con Villa Clara, donde las pesquisas se han organizado con miras a obtener mayores resultados en el control.

Desde Cienfuegos, Guantánamo, Ciego de Ávila, Sancti Spíritus y Holguín también llegaron reportes a partir de preguntas y comentarios hechos por el Primer Ministro sobre los problemas existentes en cada territorio y sobre los cuales Marrero Cruz -quien en algún momento tomó como punto de partida para los análisis las principales preocupaciones de la población- pidió el abordaje con la mayor transparencia posible.