Alta, alta como un pino

Este es un texto muy serio, tanto, que he recurrido para titularlo a una adivinanza, un recurso que nos envía a la etapa más sincera de la vida: la infancia. Hace aproximadamente dos años, escribí una crónica que también me devolvió a las lecturas de la niñez: Corazón, de Edmundo de Amicis, específicamente el cuento del pequeño vigía lombardo.
 
Entonces, los médicos cubanos habían viajado a Milán, y no para conocerla por hermosa que es, sino para salvar vidas, porque Italia se había convertido en el epicentro de la pandemia de la COVID - 19. Ahora, un grupo de italianos agradecidos ha viajado a Cuba con luces: han decidido iluminar un pino en La Habana con los colores de la bandera de la estrella solitaria y colgarle 500 lazos blancos, para recordar la hazaña de nuestros galenos.

El artífice de esta idea, Michele Curto, es de Turin, allí también fueron testigos de aquella amistad forjada en tiempos difíciles: "En nuestra región se celebra un carnaval que normalmente son cuatro días de lucha entre barrios de la ciudad, se parece un poquito a la parranda aquí en Cuba. Aquel año solo fue un día solo y después ce cerró. Todos nosotros nos quedamos encerrados en la casa y ahí empezaron las imágenes de los camiones militares que salían de la ciudad de Bergamo y eran imágenes muy fuertes. Fur en aquel tiempo, con aquel desespero, que llegó de Cuba una luz. Aterrizó primero en Crema la brigada guiada por el Doctor Carlos, Carlitos y nosotros empezamos a trabajar todos juntos para que una segunda brigada que iba a salir después de pocas semanas, pudiese llegar a nuestra ciudad. Fue la Brigada que lideraba nuestro amigo Julio. Estos 38 médicos, más los 52 de Crema, llegaron y verdaderamente infundieron una enorme esperanza. 

"En nuestra ciudad se sembró dos árboles frente al hospital COVID y poco a poco empezaron a aparecer cintas y a  llenarse estos árboles, era el renacer de la esperanza y de la fraternidad. Y yo lo transmito porque quiero que ustedes se lleven el cariño, el amor y la amistad verdadera y profunda que sigue en mi ciudad al pueblo de Cuba y a sus médicos. Estas cintas, para nosotros ha sido algo inolvidable, por eso nos hemos propuesto en nuestro  desafío, en nuestra entrega común, junto al gobierno de La Habana, junto a la Cámara de  Comercio, junto el gobierno de Centro Habana, que son nuestros hermanos, colocar este árbol acá en esta avenida".

El Proyecto...

Pero el árbol iluminado en el céntrico parque Fe del Valle es parte de una iniciativa más abarcadora: "el Proyecto de Cooperación Internacional Avenida Italia propone realizar varias actividades socio-culturales en el mes de diciembre para conmemorar el taller de inicio del proyecto, despedir un año muy difícil para la sociedad mundial y para la nuestra y festejar el 65 Aniversario de La Revolución", así lo expresa un documento elaborado por los gestores italianos y cubanos.

La jornada de celebración “Avenida Italia” se extiende desde el 10 y hasta el 30 de diciembre y propone ferias de emprendimientos y empresas estatales, conciertos de jóvenes artistas locales, actividades infantiles, demostraciones de academias de artes marciales, proyección de los partidos final y semifinal del Mundial de Fútbol en una pantalla gigante en la calle y, por supuesto, la siembra del Árbol de la Amistad.

El Árbol...

Para Michele y sus coterráneos, los doctores Carlos y Julio son héroes, así lo expresó antes de pedirles que colocaran los últimos dos lazos blancos en el Árbol de la Amistad, un pino de 14 metros de alto, que fue plantado con la colaboración de la Empresa Forestal y que durante el mes de diciembre permanecerá alumbrado por 333 metros de luces led con los colores de la bandera cubana, obra de un artista del Fondo Cubano de Bienes Culturales.

Aunque se ha ilumnado en esta época del año, este no es un árbol de Navidad. Es, eso sí, otro símbolo de lo que puede conseguir la solidaridad. Me gusta verlo también (y esta es una interpretación muy personal), como la marca luminosa de que seguimos vivos y amando en colores después de tanto, después de la pandemia, pero también después del odio que incendió El Encanto. La amistad y la luz vienen juntas, tanto para embellecer como para salvar.