Cayo Coco

Ciego de Ávila, 7 ene (ACN) La floresta de la cayería norte de Ciego de Ávila, área cubana considerada entre las mejores del Caribe para las excursiones y el ecoturismo, se recupera de las afectaciones que el huracán Irma causó a su paso por la provincia.

Guanos de costa, uvas caletas, mangles, cocoteros y almácigos, entre otras vegetaciones, muestran otra vez sus colores y resistencia, lo cual garantiza que especies de vertebrados terrestres y aves cuenten con sus refugios y alimentación seguros.

El gavilán caracolero, la gallinuela de agua dulce y el tocororo, este último reconocido como el ave nacional de Cuba, constituyen una de las principales riquezas naturales muy apreciadas en Jardines del Rey.

María del Carmen Olivera Isern, directora de la Unidad de Medio Ambiente en la delegación territorial del CITMA, informó a la ACN que la cayería norte avileña recobra su vitalidad como uno de los escenarios cubanos que forma parte del corredor de aves migratorias en el archipiélago Sabana-Camagüey.

La especialista aseguró que con el paso de los días los pájaros vuelven a cantar y se avistan ejemplares de la mariposa galana, bijirita chica, títere playero, zarapico blanco y el víreo de las Bahamas, entre otros.

También se observan colonias de flamencos rosados, una de las especies de animales que más sufrieron los impactos del meteoro, pero para tranquilidad de todos, estas aves, de gran belleza y alto valor contemplativo, ya cuentan con las condiciones de alimentación y descanso para reproducirse, agregó.

Las lluvias y los fuertes vientos del fenómeno hidrometeorológico afectaron a más del 95 por ciento la vegetación en esos islotes, pero el proceso de recuperación ha sido muy rápido, explicó Olivera Isern.    

Como parte del programa de conservación de la biodiversidad que se acomete desde hace algunos años en el archipiélago Sabana-Camagüey, se reforestan esos entornos con plantas nativas de la zona costera.

Estas labores, a corto plazo, forman parte del programa gubernamental Tarea Vida que se materializa en toda en Cuba para cuidar los ecosistemas donde habitan especies de la flora y la fauna, endémicas locales y nacionales.

De la flora terrestre, en Jardines del Rey, se han reportado 706 especies de las cuales, 126 son endémicas, algunas poseen valor medicinal, ornamental, comestible y maderable y pueden ser admiradas a través de senderos ecoturísticos de carácter interpretativo como Las Dunas y Las Dolinas en Cayo Coco.