Con la intensión de declarar al mayor balneario de la nación como playa ecológica, algo que pudiese acontecer en el contexto de la próxima Convención Internacional de Turismo, se procederá a partir del próximo mes al vertimiento de arena en seis de sus sectores más emblemáticos, una práctica ingeniera que se inició en 1987.
A punto de cumplir 132 años, Varadero se renueva previsoramente con esta regeneración artificial, ya que al decir de Especialistas del Centro de Servicios Ambientales aquí, aunque se trata de una medida preventiva, no es menos cierto que la playa exhibe un proceso de erosión moderado.
Durante el próximo vertimiento se procederá a modelar una nueva playa a la altura del antiguo hotel Oasis, donde se ejecutan dos nuevas instalaciones y a la par, especialistas del tema estudian lo oportuno de acometer similares acciones en los cayos Largo y Blanco, según comentó Ángel Alfonso, especialista de la Unidad de Medio Ambiente aquí.
Con el auxilio de medios y especialistas de la empresa inversiones Gamma S.A, del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, se procederá a la regeneración de varios sectores del famoso balneario, recurso ingeniero que requiere de un riguroso estudio de compatibilidad del material extraído con el de la sílice nativa presente en las áreas receptoras del vertimiento.
Como se conoce, más del 80% de los balnearios cubanos tienen retrocesos en la línea de costa que promedian 1,2 metros por año; lo cual puede ser superior en algunos sectores de ahí que el vertimiento además de mejorar y ampliar el área de playa y de sol, propicia que una parte de la arena depositada fortalezca la duna.
La regeneración de playa también facilita la creación de los llamados bancos de arena, de tal forma que las olas rompen mucho antes de llegar a la costa y la playa se proteja mejor.
Como dato de interés, el mayor volumen de arena vertido en la llamada playa Azul, correspondió al año 1998, cuando se totalizó poco más de un millón de metros cúbicos.
(Con información de Radio Rebelde)