Estrés sostenido, unas copas de más, comidas abundantes y/condimentadas, todo ello muy usual en los últimos días del año, pueden jugarnos una mala pasada y una molesta acidez estomacal o pirosis.
Se trata de una especie de quemazón interior que recorre el aparato digestivo desde el estómago hasta la garganta. Además de dolor, puede provocar lesiones en el esófago si no se trata de manera adecuada. Lo indicado ante ello, si el mal es recurrente, consiste en acudir al médico.
Existen numerosos remedios caseros para paliar la acidez estomacal como beber un té de lechuga, masticar semillas de anís, comer una mezcla de piña y fruta bomba. Quizás resuelva con ello, al menos de momento, el malestar, pero lo idóneo es llevar a una dieta sana, sin excesos.
Además, se recomienda no comer antes de hacer ejercicios pues la adopción de posturas extrañas no favorece la digestión y si provocar reflujo ácido y ardor de estómago; sin embargo, una caminata o paseo ligero puede resultar muy beneficioso.
Tampoco coma antes de acostarse. Debe darle tiempo al estómago para hacer la digestión, y lo mejor es permanecer sentados o de pie; o sea, con el esófago en posición vertical. El consejo de los médicos es: una cena ligera y dejar pasar un par de horas antes de irnos a la cama. Siempre que le sea posible duerma con cierta inclinación (eleve la almohada o el colchón en la zona del torso) puesto que el esófago queda en posición horizontal; igualmente, deseche la abundancia de comida pues por lo general se abusa de alimentos grasos o de difícil digestión.
Recuerde que el café, el té, los refrescos carbonatados y el alcohol favorecen la acidez, en tanto los platos fritos, estofados, las salsas densas y el chocolate retrasan el vaciado gástrico. Respecto al vinagre, el pimiento, algunos condimentos y las frutas cítricas pueden ser desencadenantes de ardores estomacales en personas más sensibles. Ingiéralos, pero siempre con mucha moderación.
Por último, deseche la ropa muy ajustada en la cintura. ¿Por qué? Al ejercer presión en el estómago entorpece la digestión y puede propiciar la sensación de acidez.